Esta obra, que tendrá un coste total de 1.430.000 euros, se enmarca dentro del plan de mejora energética del polígono de Balaídos que está acometiendo el Consorcio para conseguir una mayor competitividad de las empresas instaladas en su polígono más tradicional. De hecho, con el paso a alta tensión, GKN conseguirá unos ahorros en la factura eléctrica de más de un millón de euros al año.

Esta subestación recibirá la energía desde la línea eléctrica de alta tensión que también dará servicio a la nueva depuradora de Vigo y que, para no duplicar instalaciones, el Consorcio ha realizado al 50% con la empresa pública Acuaes en el tramo que llega hasta la entrada del polígono. El coste asumido por el Consorcio en la ejecución del tendido de la línea ha sido de 1.800.000 euros, con lo que el coste total de la elevación de la tensión de suministro a la planta de GKN asciende a 3.250.000 euros.

La obra tiene un plazo de ejecución de 300 días y se realiza en base al convenio suscrito el año pasado entre el Consorcio y GKN Driveline Vigo, empresa que posteriormente alquilará al Consorcio esta instalación para uso de su planta que hoy ocupa más de 78.000 metros cuadrados en Balaídos. La construcción de esta subestación para la conexión a la red de distribución en alta tensión, en lugar del actual suministro en media tensión, permitirá mejorar la seguridad y fiabilidad del suministro de energía y reducir los costes de los términos regulados de la energía eléctrica. Cálculos técnicos prevén que con el cambio de tarifa la planta podrá ahorrar más de un millón de euros al año.

El contrato incluye también las obras civiles, estructuras e instalaciones auxiliares inherentes a la SE GKN. Como explicó Pedrosa, uno de los objetivos de su mandato ha sido la renovación de las infraestructuras del Polígono de Balaídos, cuya superficie, de aproximadamente un millón de metros cuadrados, se halla ocupada en su práctica totalidad por empresas pertenecientes al sector del automóvil.