En esta jornada se mostraron algunas herramientas tecnológicas desarrolladas en el marco de los proyectos europeos TopWood y MySustainableForest para identificar la calidad del recurso, optimizar la gestión y clasificar la materia prima. El uso de estas herramientas permite dirigir la producción hacia productos de mayor valor añadido y optimizar el rendimiento económico de la cadena.

El sector forestal y de la madera de Galicia forma parte de un mercado globalizado altamente competitivo donde el uso del recurso se optimiza según los requisitos de calidad exigidos por el cliente. El aprovechamiento y procesado de la madera local es más eficiente si se conoce previamente el estado “tecnológico” de la masa forestal, en cuanto a propiedades de la fibra, productividad, sanidad, biodiversidad, entre otros aspectos.

Mesa redonda

El punto fuerte de la jornada fue una mesa redonda sobre el impacto de la innovación en las empresas de transformación de madera, moderada por Ricardo González, gerente del Clúster da Madeira e o Deseño de Galicia, al que está asociado Madera Plus. En ella participaron profesionales de toda la cadena de valor de la madera: Francisco Dans, de la Asociación Forestal de Galicia, Federico Ruiz, de ENCE, Javier Silva, de Finsa Aserradero, Ana Oróns, de Fearmaga, Jacobo Feijóo, de Asegofa, Juan Picos, de la Universidad de Vigo, Julia Yagüe, de GMV, Alejandro Martínez-Meier, de INTA, Jean Paul Charpentier, de INRA, Azahara Soilán, del CIS Madeira-Axencia Galega da Industria Forestal, y Esther Merlo, de Madera Plus.

En esta mesa redonda la industria de aserrado planteó su apuesta por productos de madera maciza de alto valor añadido, para promover el uso de la madera local, en beneficio del monte y se interesó por una caracterización previa. ENCE resaltó la importancia de la especie, la selvicultura y del sitio en la calidad de la pasta y habló del uso de las tecnologías presentadas. Los propietarios reclaman conocer las necesidades tractoras de la industria para proponer una selvicultura viable y no descartan la validación de las propiedades de la madera producida.

Al término del encuentro se puso de manifiesto que las tecnologías van a permitir nuevos modelos de negocio con nuevos productos a extraer de masas hoy abandonadas, por lo que una solución sería conectar el valor añadido de la industria con el propietario como solución al abandono rural, ligado éste a la falta de rendimiento económico de una masa forestal. En esta línea se señaló que si no existe riqueza en el rural, no va a haber sector forestal.

Todos los participantes coincidieron en la necesidad de promocionar el uso de la madera gallega y, para ello, es fundamental conocer qué madera hay en el monte para evitar tener que importarla de fuera.