En el encuentro celebrado en la mañana de este viernes, el presidente de la Xunta insistió en la necesidad de establecer una unidad de acción con Asturias para trasladar al Gobierno central no solo la preocupación ante la situación, sino la necesidad de buscar una solución urgente. El conselleiro de Economía, Emprego e Industria, subrayó, por su parte, que los trabajadores tanto de A Coruña como de Avilés “saben que cuentan con todo el apoyo y el compromiso de la Xunta para afrontar esta situación de dificultad en la que tenemos que trabajar y siempre con la colaboración entre las dos administraciones autonómicas y los comités de empresa”.

En el transcurso de la reunión se acordó actuar en una doble dirección: solicitar a Alcoa que levante el expediente de regulación de empleo para que se siente a negociar con los trabajadores y abrir una vía de diálogo y, de manera simultánea, instar al Gobierno a que trabaje en un marco eléctrico estable y conocido de cara a 2019 que dé certeza y credibilidad a las empresas. En este sentido, el Gobierno central no estableció aún ese mecanismo que es preciso fijar para el sistema de interrumpibilidad en 2019. En la Xunta no se comprende ni se acepta la decisión de la empresa: “Llevamos diez años trabajando y hasta ahora siempre encontramos soluciones”, aseguró el conselleiro de Economía, quien explicó que siempre se llegó a una solución que permitió mantener la actividad industrial y que es el Gobierno central quien debe dar esa respuesta.

El presidente de la Xunta celebra este viernes a la tarde en Asturias una reunión con su homólogo del Principado, Javier Fernández, para fijar la hoja de ruta que se debe seguir de la mano de los trabajadores. Para la Xunta, ambos encuentros muestran que Galicia y Asturias ofrecen su mano tendida al Gobierno central para conseguir una solución y poder corregir esta situación que pone en peligro 700 puestos de trabajo y una importante actividad industrial.