Considera varias cláusulas abusivas
El juzgado anula varias cláusulas de los contratos impuestos por la vieja Pescanova a Nueva Pescanova
El Juzgado de lo Mercantil nº 3 de Pontevedra ha declarado la nulidad de algunas cláusulas de los contratos que la antigua Pescanova, como administradora, impuso a Nueva Pescanova en octubre de 2015.
En concreto, la sentencia ha anulado las cláusulas contractuales referidas a la penalización por cualquier tipo de incumplimiento de contrato por parte del Nueva Pescanova y por el tipo de interés de demora al considerarlos abusivos. El contrato celebrado unilateralmente por la antigua Pescanova en 2015 incluía cláusulas abusivas a Nueva Pescanova, obligándole a pagar dos millones de euros por cualquier tipo de incumplimiento de contrato y establecía un interés de demora del 20%.
La sentencia considera, además, que la antigua Pescanova, en su condición de administradora “transitoria y provisional” de Nueva Pescanova, infringió sus deberes de lealtad como administrador al imponer cláusulas “evidentemente gravosas para Nueva Pescanova”. De este modo, la sentencia confirma la valoración que Nueva Pescanova tenía de los contratos impugnados y de las cláusulas cuya nulidad fue solicitada.
La sentencia también declara que la antigua Pescanova vulneró sus deberes de lealtad como administradora e incurrió en conflicto de interés, al suscribir estos contratos que se excedían del contenido del convenio.
A raíz del hecho relevante publicado remitido por la antigua Pescanova a la Comisión Nacional del Mercado de Valores, Nueva Pescanova lamenta "su utilización permanente de comunicaciones al mercado como 'notas de prensa' que reflejan de forma incompleta y subjetiva la realidad, trasladando el mensaje de haber obtenido una sentencia favorable cuando en realidad no es así". En ese hecho relevante, la vieja Pescanova reseña que la sentencia mantiene «la obligación de seguir prestando a la vieja Pescanova las medidas de apoyo previstas en el proyecto, medidas que estaban siendo deliberadamente incumplidas por Nueva Pescanova en los últimos tiempos».
Demanda por cláusulas gravosas
Nueva Pescanova presentó una demanda contra la antigua Pescanova en referencia a contratos unilateralmente decididos el 27 de octubre de 2015 por el consejo de Pescanova inmediatamente antes de la Junta General de Socios de ésta última, donde Pescanova perdió el control de Nueva Pescanova, por su contenido abusivo.
En su demanda Nueva Pescanova estimaba también que estas actuaciones habían sido hechas de forma unilateral y no transparente en clara infracción de los deberes de lealtad hacia el resto de los socios de Nueva Pescanova que ya habían desembolsado el importe de sus acciones, en exclusivo beneficio de la antigua Pescanova y en perjuicio de Nueva Pescanova.
La decisión de acudir a los tribunales por parte de Nueva Pescanova se produjo tras sus "infructuosos y reiterados esfuerzos" en conciliar posturas con la vieja Pescanova.