El Puerto Exterior sigue captando tráficos
Seis operaciones simultáneas de carga y descarga ponen a prueba las capacidades de Punta Langosteira
Cerca de 60.000 toneladas de carga se están moviendo desde este lunes en las instalaciones del Puerto Exterior de A Coruña, con operaciones simultáneas en cinco cargueros y una plataforma.
Además de la plataforma "Blue Marlin", que ultima los preparativos para su partida esta semana tras completar la carga de cajones de hormigón fabricados en Langosteira con destino a Escocia, cinco cargueros están en proceso de carga o descarga de mercancías, con la participación de las empresas estibadoras Galigrain, Pérez Torres y TMGA.
Los buques atracados en el Puerto Exterior coruñés son "StarOmicron", que está desembarcando una carga de 27.200 toneladas de soja; el "Manisa Kate", con una descarga de 7.700 toneladas de cemento; el "Kiowa", que desembarca 6.600 toneladas de pulpa de remolacha; el "Inaba", que está descargando 4.900 toneladas de coque, y el "EemsExe", que también opera con coque, pero en operación de embarque, de 3.000 toneladas.
Entre los cinco suman una carga cercana a las 50.000 toneladas, a la que hay que sumar las 10.000 toneladas de la última fase de carga del "Blue Marlin", encargado de transportar a Aberdeen los materiales fabricados en Punta Langosteira, elegido como puerto base para elaborar 22 cajones con destino a la construcción del nuevo puerto exterior escocés.
Capacidad de las instalaciones portuarias
Desde la Autoridad Portuaria de A Coruña se destaca que la intensa actividad en el Puerto Exterior pone de manifiesto una vez más la capacidad de las instalaciones para albergar simultáneamente todo tipo de operaciones, así como el impulso que va alcanzando en el proceso de captación de tráficos.
A lo largo del presente ejercicio se han superado ya 1,65 millones de toneladas, consolidando el de Langosteira como el primer muelle polivalente en volumen de mercancía del conjunto total de líneas de atraque del Puerto de A Coruña. Todo apunta a que se cumplirán las previsiones de este año, superándose los 2 millones de toneladas movidos en unas instalaciones que se preparan para la llegada de los graneles líquidos y, con ello, para un nuevo salto en su estadística de tráficos.