Manuel Rañó y su equipo, que tomaron posesión de sus cargos esta misma semana, agradecen el respaldo de los profesionales de la arquitectura técnica de la provincia de Pontevedra. En su opinión, “que haya participado una única candidatura ratifica el consenso y la unidad en el seno de nuestro Colegio”.

Para los próximos cuatro años el nuevo presidente del Colegio Oficial de la Arquitectura Técnica de Pontevedra (Coatpo) ofrece “compromiso para defender los intereses de una profesión apasionante y estratégica para confirmar la recuperación económica tras el impacto de la pandemia de la Covid19 en toda la provincia”.

La Junta de Gobierno, presidida por Manuel Rañó, tendrá como secretaria a Paula Vázquez Prieto y como tesorera-contadora a Xiana Alonso. El delegado en la Demarcación de Pontevedra será Ricardo Sobral Casalderrey; y el delegado en la Demarcación de Vigo, Antonio Arias Rodríguez. Completarán el equipo Pablo Freiría Lorenzo (vocal primero), José Manuel Iglesias Ferreira (vocal segundo) y Alba Aguete Iglesias (vocal tercera).

Manuel Rañó releva a Pelayo Celso Eyo Valladares, que ha tenido una larga y fructífera trayectoria en el Coatpo. El nuevo presidente, que desempeñó el cargo de Delegado de la Demarcación de Pontevedra en los dos últimos mandatos, tuvo palabras de agradecimiento para el presidente saliente. “Gracias a la gestión del equipo encabezado por Pelayo Eyo, del que fue un honor formar parte, nuestra profesión ganó en prestigio y consideración y jugó en los últimos años un papel relevante en el desarrollo económico y social en toda la provincia de Pontevedra”. “Para mí es un orgullo tomar el relevo de nuestro hasta ahora presidente”, dijo  Rañó, quien agradeció el liderazgo ejercido por Pelayo Eyo, con cargos en la Junta de Gobierno desde 1985 y como presidente del Coatpo durante los últimos ocho años.

La nueva Junta de Gobierno basará su gestión en defender la profesión y su deontología profesional; colaborar con las diferentes Administraciones públicas; ofrecer formación continua de calidad a los colegiados; reivindicar el desarrollo tecnológico y ahorro energético; abogar por la calidad, la seguridad y la salud; y cuidar y conservar el medio ambiente.