El rating emisor a largo plazo ha sido afirmado en BB+, a un escalón del grado de inversión, y el de corto plazo en B.

Desde Abanca se expone que Standard and Poor’s ha tenido en cuenta para su decisión "el aumento continuado de la rentabilidad recurrente que la entidad ha venido consiguiendo, así como las sólidas perspectivas de mejora a futuro en un entorno de tipos de interés negativos".

Además, Standard and Poor´s destaca que la calidad de los activos de Abanca se sitúa por encima de la del sector, y enfatiza su adecuada capitalización y equilibrado perfil de financiación.

Durante 2018 y 2019, la entidad bancaria ha recibido 13 acciones de carácter positivo de las cuatro agencias que la califican. En ese periodo de tiempo, S&P ha mejorado su visión sobre el rating de entidad de Abanca en tres ocasiones. Actualmente, el banco cuenta con grado de inversión de las agencias Fitch y DBRS.