Endesa achaca su decisión a la "profunda modificación de las condiciones de mercado" por el incremento sustancial en el precio de los derechos de CO2 y la caída significativa del precio del gas, que ha llevado a la central de As Pontes - también a la de Carboneras (Almería) a sufrir "una importante falta de competitividad en la cobertura de la demanda de mercado y a que, por consiguiente, se haya acentuado su exclusión de este".

Por estos motivos, y "ante la clara ausencia de perspectivas de mejora en el futuro", Endesa solicita el cierre de ambas centrales, cierre que ya había anticipado en septiembre a los mercados y a las autoridades institucionales y agentes sociales. Desde dicho momento, Endesa ha venido analizando alternativas de funcionamiento de las plantas mediante el empleo de biomasa, que "no han resultado satisfactorias, tanto desde un punto de vista técnico y medioambiental, como económico, lo que las hace inviables".

En su comunicado, la compañía energética indica que se reserva el derecho de desistimiento de la petición de cierre, en su conjunto o parcialmente, "en el supuesto de que, como consecuencia de las pruebas adicionales de combustión con distintas mezclas de combustible, tanto en la central de As Pontes como en la de Carboneras, que se realizarán en los próximos meses, pudieran variar los resultados y garantizar la viabilidad de las plantas".

Señala Endesa que su solicitud es "plenamente coherente con el objetivo de conseguir un sistema energético totalmente descarbonizado en el año 2050".

Rechazo de la Xunta al cierre de As Pontes

Antes de presentar la solicitud de cierre, la compañía ha informado de ello a los representantes del Ministerio, a las autoridades autonómicas de Andalucía y de Galicia y a las de los municipios en los que se hallan ubicadas las plantas.  A este respecto, el conselleiro de Economía, Emprego e Industria, Francisco Conde, ha declarado que la Xunta "non asume" el cierre de la central térmica de As Pontes, una decisión de la empresa que considera "inxusta, precipitada e non consensuada con todos os axentes que levan meses traballando para identificar de forma conxunta unha solución para que a planta poida ter unha oportunidade de futuro".

El conselleiro lamentó la ausencia de política energética del Gobierno central y le urge a activar un plan de transición "xusta, ordenada, e social que permita a Galicia optar aos fondos europeos que estarán activos neste eido en 2021". Conde recuerda que son 750 familias las que dependen de la actividad en As Pontes y que en Europa hay 149 centrales de carbón "que están mantendo a súa produción e o seu emprego".

Plan para la central térmica de As Pontes

En paralelo a la solicitud, Endesa ha presentado tanto para As Pontes como para Carboneras un proyecto de actuaciones para atenuar el impacto provocado por el cierre, Plan Futur-e, destinado a promover el desarrollo de actividades económicas y generación de empleo en las zonas en las que se encuentran ubicadas las dos centrales. En el marco de este plan, Endesa respetará el puesto de trabajo de todos los empleados de las dos centrales, 174 en el caso de As Pontes y 113 en Carboneras. En concreto, se abrirán procesos de recolocación y ya se han iniciado medidas formativas para mejorar la capacitación técnica de los empleados, que también se tendrán en cuenta para las labores de desmantelamiento de las centrales y futura operación y mantenimiento de los nuevos parques renovables.

Respecto a las empresas auxiliares que prestan actualmente servicio para las plantas de As Pontes y Carboneras, Endesa priorizará la contratación de personas del entorno para acometer los trabajos de desmantelamiento de ambas plantas una vez aprobada la solicitud, así como en el desarrollo de las nuevas instalaciones renovables que se propone llevar a cabo en las zonas de las dos centrales. 

Para el desmantelamiento de las instalaciones de As Pontes (que cuenta con cuatro grupos de generación) se estima una duración de alrededor de 4 años, más las tareas previas, que generarán en torno a 130 empleos directos con puntas de trabajo de hasta 200 personas. 

Asimismo, los planes Futur-e de la empresa incluyen inversiones en proyectos de energías renovables. Concretamente, Endesa se propone desarrollar hasta 1.505 MW de nueva capacidad eólica en Galicia entre 2020 y 2026, con una inversión estimada de 1.581 millones de euros y una generación de más de 1.250 empleos de media anual durante los 6 años de la fase de construcción y 125 para la de operación y mantenimiento durante los siguientes 25 años. De esta capacidad, ya está confirmada la conexión de 165 MW, con una inversión estimada de 173 millones de euros y una creación de 825 empleos directos en la construcción.

Hasta la autorización de cierre, la planta de As Pontes irn dando salida progresivamente al carbón que tiene almacenado.