Para ello, Ence no alterará sus tarifas de compra de madera de eucalipto publicadas en su página web para las comunidades de montes y propietarios forestales particulares de las zonas afectadas por los incendios. De este modo, la papelera garantiza el mantenimiento de precios ante puntuales excesos de oferta derivados de la necesidad de los propietarios de vender pronto su madera para poder restaurar el monte cuanto antes.

Ence no puede consumir madera quemada en su proceso de producción, pero sí puede aprovechar aquella que sólo ha sido afectada por el fuego en su corteza. La madera que Ence puede utilizar tiene siempre que estar libre de carbonilla una vez descortezada para poder cumplir los estándares de calidad necesarios para la producción de celulosa.

Esta decisión responde a la política a largo plazo de Ence de colaboración y ayuda al propietario forestal para avanzar hacia un sector forestal en Galicia "fuerte, sostenible y competitivo, que contribuya a la generación de rentabilidad para el propietario y la creación de empleo rural". Muestra de este compromiso son también las subidas de precio de compra de la madera que Ence está aplicando a sus suministradores durante todo este año, dados los incrementos del precio de la celulosa en el mercado internacional y que la compañía comparte con los propietarios forestales.

Los principales montes vecinales en mano común de las zonas que resultaron alcanzadas por los incendios y Ence ya se han puesto en contacto para evaluar la situación de su madera y poder preparar una oferta por la cantidad de madera que se pueda utilizar para la producción de pasta.

Además, esta iniciativa se enmarca en el acuerdo alcanzado por las principales asociaciones del sector y entregado a la Administración, que incluye un código de buenas prácticas de compra transparente de madera por parte de la industria forestal gallega, de tal forma que no se discrimine la madera afectada por el fuego con respeto del precio normal de la madera verde en los usos industriales mientras se normaliza la situación y el mercado absorbe los lotes de madera afectados.