El presidente de Asime, Justo Sierra, comenzó su alocución a los socios haciendo un repaso a los datos de 2021, año en que se han visto los primeros signos de recuperación tras la pandemia. Sin embargo, el escenario de incertidumbre actual, con la guerra de Ucrania y el paro de transportes que se suman a una situación de encarecimiento y escasez de materias primas que se viene arrastrando desde hace meses, ponen en cuestión la ansiada recuperación.

 “El paro de transportes ha golpeado con fuerza a las empresas del sector, sobre todo en Galicia. Se han producido retrasos en los pedidos y empresas que producen maquinaria de gran tamaño han experimentado problemas de almacenaje en sus plantas. Si bien, entendemos que esta situación es pasajera y confiamos en que las últimas actuaciones puestas en marcha en el seno del diálogo social sirvan para desbloquear de una vez por todas esta situación cuanto antes”, afirmó Sierra.

El paro en los transportes ha sido la gota que ha colmado el vaso, pero el sector metalúrigico atraviesa desde hace meses de una situación complicada. “Las empresas del sector atraviesan una situación en muchos casos más grave incluso que durante los peores momentos de la pandemia. Llevan dos años soportando las paradas provocadas por la covid, seguidas por la subida desorbitada de los materiales, la falta de suministros y la explosión del coste energético, agravado ahora por las sanciones económicas a Rusia y las dificultades con los transportes”, destacó Justo Sierra.

Alza de precios de las materias primas

Desde Asime apuntan a que productos como el paladio o el cobre han duplicado su valor. El aluminio se ha encarecido un 80%, a la vez que el gas cuesta 10 veces más que hace un año y los aceros tres veces más. Otros, como la chapa, no solo se han encarecido un 35%, sino que es prácticamente imposible encontrar suministro estable de aquí a final de año; y es que las acerías europeas no tienen capacidad para dar respuesta a las necesidades del sector, a la vez que importar esos materiales de fuera de la Unión no está permitido o está muy gravado para proteger a los productores europeos.

A esto se suman las consecuencias de las sanciones a Rusia, país que concentra el 40% de la producción mundial de paladio, segundo productor mundial de aluminio primario y proveedor del 40% del gas que llega a Europa; con unos costes energéticos que han hecho parar ya a varias industrias electrointensivas. A su vez, el impacto en Ucrania se hace notar a nivel internacional, ya que por ejemplo el puerto de la sitiada Mariupol era un centro relevante como proveedor de chapas y aceros a la industria europea y gallega en particular.

Todo esto está provocando una “tormenta perfecta que ha tirado por tierra todas las previsiones del sector para este año. Estamos ante un grave problema de desabastecimiento de materias primas que está retrasando los proyectos y la senda de la recuperación. Hay empresas que, si no se estabiliza la situación, tendrán que volver a recurrir a los ERTEs”. Desde Asime destacan que “estamos pagando el precio de depender de otros. El 90% de las materias que consume la industria europea proviene de China. Debemos revisar las políticas estructurales de la Unión Europea y apostar por relocalizar industrias clave”.

En todo caso, Justo Sierra dejó espacio para el optimismo en su discurso. “Nuestra industria es sólida, como ha demostrado resistiendo en los peores momentos de la pandemia. Tenemos el músculo para impulsar la recuperación, pero para ello es necesario estabilizar esta situación a nivel internacional y hacerlo desde la colaboración público-privada y con el impulso que supondrán los fondos europeos Next Generation EU”, concluyó el presidente de Asime.

Intervención de la conselleira de Emprego

Durante el acto institucional que siguió a la asamblea de la Asociación de Industrias del Metal y Tecnologías Asociadas de Galicia intervino la conselleira de Emprego e igualdade, María Jesús Lorenzana, que hizo hincapié en la “capacidad de resiliencia ejemplar” del sector metalúrgico y se refirió a los dos retos a los que se enfrenta el sector,"que pasan por la transformación de los puestos de trabajo hacia la digitalización y por una mayor incorporación de mujeres a la industria”. Así Lorenzana subrayó que entre 2015 e 2020 el empleo creció un 23% en este sector y solamente el 20% de los puestos generados fueron ocupados por mujeres.

Lorenzana aludió también a la Axenda Galega de Capacidades, en la que ha contribuido activamente Asime, a través de la cual "estamos haciendo confluir la oferta y la demanda de empleo, para aumentar la productividad de las empresas y ofrecer nuevas oportunidades laborales a la ciudadanía". En esa línea, Lorenzana destacó el programa Empreganav impulsado junto a Asime, que trabaja en la reinserción al mercado laboral de 500 personas desempleadas de la industria auxiliar naval.