Promover la eurorregión como hub logístico y la reducción de costes de las empresas, prioridades para 2023
La CEP ejecutó un presupuesto de 1,9 millones de euros en 2022
La asamblea general de la Confederación de Empresarios de Pontevedra (CEP) aprobó este lunes por unanimidad las cuentas del 2022, ejercicio durante el que el presupuesto ejecutado creció un 7% respecto al de año anterior, hasta superar la cifra de 1,9 millones de euros.
Durante 2022, la Confederación de Empresarios de Pontevedra (CEP) llevó a cabo 15 proyectos de ámbito provincial, autonómico y nacional, en áreas como Formación, Empleo, PRL, Diálogo Social, Competencias Digitales y TIC en el contexto transfronterizo, financiados con fondos europeos, por un importe de 1,7 millones de euros.
El conjunto de estas actividades supuso aproximadamente un 68% de los ingresos de la CEP durante 2022. El resto provienen de la actividad propia de la Confederación, como prestación de servicios, cuotas de asociados, consejo asesor, etc.
El superávit obtenido en el ejercicio superó los 60.000 euros. El resultado, en relación al obtenido en el 2021, creció un 72%. Esta evolución, sumada a la del año anterior, mejora significativamente la solvencia de la organización.
Plan de actuaciones
Otro de los acuerdos adoptados en la asamblea de la CEP, que queda configurada por 206 vocales (un 40% más), fue la aprobación de un Plan de actuaciones que se orienta a promover la eurorregión como hub logístico y a la reducción de costes de las empresas mediante la innovación (factoría de innovación), creación de nuevas herramientas y formación. Por otra parte también se seguirá apostando por la promoción de la igualdad y la colaboración en la mejora de la sostenibilidad y la reducción de la huella de carbono.
En la reunión del empresariado pontevedrés también hubo tiempo para analizar el contexto actual. Los presentes expresaron su preocupación por la inflación, la presión fiscal la subida de la deuda pública, el encarecimiento de los costes laborales y financieros, el alza de los precios de la energía y bienes de equipo, la prolongación de la guerra en Ucrania… entre otros factores.
En general, tras un cierre del 2022 marcado por la desaceleración de la economía, y una recuperación incompleta y heterogénea por sectores y territorios, los empresarios de Pontevedra prevén un ejercicio marcado por la incertidumbre y la inestabilidad, así como por las citas electorales en el ámbito nacional, con un entorno cada vez más hostil y complejo para el tejido productivo privado, que ve comprometida su competitividad y amenazada su viabilidad, en el corto y medio plazo.