La votación de la propuesta de reforma de Estatutos de la patronal gallega recibió un 55% de votos favorables y 45% de abstenciones, ya que no hubo votos en contra. Del total del censo electoral del órgano -con 183 vocales-,  la Asamblea General Extraordinaria contó 154 votos presentes y representados.

Pese al voto favorable del 55%, la reforma no salió adelante ya que según el artículo 15 de los Estatutos vigentes, los acuerdos relativos a la reforma de los mismos requieren el voto favorable, como mínimo, del 75% de los presentes y representados. Para  que prosperara la reforma hubiesen sido necesarios 116 votos a favor.

Del resultado de la votación se deduce que prosigue la división en dos bandos en el seno de la CEG. De una parte, las confederaciones provinciales de A Coruña y Lugo, y de otra Pontevedra y Ourense, con el apoyo de las organizaciones sectoriales.

Votación en bloque

Una de las razones de que la propuesta de reforma no saliese adelante es que esta fue votada en bloque. Lo cierto es que la comisión estatutaria que había trabajado en los últimos seis meses en la redacción de los nuevos estatutos había logrado un alto consenso. Desde el entorno de la patronal coruñesa se señalaba que existía consenso en unos 30 puntos de la reforma estatuaria.  De igual modo se expresaban fuentes cercanas a la Confederación Empresarial de Ourense; en un 90% el documento gustaba a prácticamente todas las partes, con excepción de los puntos referidos a delegaciones de votos y composición de la junta directiva. Desde Ourense entendían que las asociaciones sectoriales deben pasar a tener una participación más activa que hasta ahora, postura que no se compartía desde A Coruña. 

Desde ambos bandos ya se ha avanzado que se intentará alcanzar un acuerdo, aunque desde Ourense advierten que si no hay voluntad de ceder por ambas partes, estará difícil. Añaden desde la CEO la posibilidad de un "replanteamiento" de su relación con la patronal gallega. 

Por el momento, el gobierno de la Confederación de Empresarios de Galicia continuará a ser ejercido de manera interina, como ha sucedido en este último año, por parte de los vicepresidentes.