La Junta de Gobierno de la Diputación de Pontevedra ha aprobado unos precios públicos por los servicios que se prestan en los viveros de empresas de Barro-Meis y Lalín, una regulación que supone que el precio de los alquileres bajen hasta más de la mitaad. El objetivo, lo explicaba la presidenta, Carmela Silva: "hacer un esfuerzo para que las naves y oficinas de los viveros sean más atractivas para la instalación de nuevas empresas, autónomos, pymes y personas emprendedoras".

Silva aseguró que cuando llegó a la Diputación encontró "unas instalaciones puestas en marcha sin ningún estudio previo de viabilidad; sin tener en cuenta la situación económica en la que se acometía la inversión, en plena crisis económica, cuando estaban cerrando numerosas empresas; y sin analizar las repercusiones que podrían producir, ocasionando un efecto negativo, ante un exceso de oferta y merma de la demanda". La presidenta provincial añadió que "las dimensiones con las que contaba, sobre todo el vivero de Lalín, eran erróneas, con naves de tamaño excesivo, con una distribución irracional de oficinas y naves y sin dar respuesta a las nuevas formas de gestión".

Ante esta situación el gobierno provincial puso en marcha, en un primero momento, una cuotas con precios de mercado inferiores a los del mercado libre, con el objetivo de ocupar el suelo e incentivar la promoción económica, el empleo y las condiciones para la creación de nuevas empresas.  Sin embargo, "basándonos en estudios y análisis, consideramos que más que cuotas es preciso que la naturaleza jurídica de las tarifas para el uso de los viveros fueran precio público, dándole así más seguridad a las personas viveristas", explicó Silva.

Por ello se decidió aprobar unos precios públicos, más bajos, que oscilan entre los 1,78 euros/mes por metro cuadrado para las naves de Barro-Meis para el primer año de uso por parte de sus ocupantes (en Lalín el precio equivalente es de 3 euros al mes), los 2,28 euros por metros cuadrado mensuales para las oficinas en Barro-Meis (3,5 en Lalín) y los 2,28 euros al mes por el puesto de coworking en Barro-Meis (3,5 euros en el vivero de Lalín). En el segundo y tercer año de ocupación los precios se incrementan.

La presidenta de la Diputación de Pontevedra concluyó que "estos nuevos precios públicos son el resultado de estudios y análisis serios sumados al esfuerzo que estamos a hacer para impulsar el emprendimiento como motor de desarrollo económico y social de la provincia".