.Al igual que en la cita del 13 de septiembre, coincidieron en los muelles coruñeses tres de los buques más grandes de las flotas de las principales navieras: el "Independence of the Seas", el "Koningsdam" y el "Mein Schiff 4". A primera hora arribaban al Puerto coruñés procedentes de Southampton, el "Koningsdam", con 2.555 pasajeros y 1.200 tripulantes, y el "Mein Schiff 4", con 2.586 pasajeros y 1.000 tripulantes. A media mañana lo hacía el "Independence of the seas", con 4.035 pasajeros y 1.438 tripulantes. 

Desde la Autoridad Portuaria, su presidente, Enrique Losada, ha señalado la importancia tanto estratégica como económica de jornadas como la de hoy, cuyo impacto es aún mayor en cuanto a imagen dada la reciente triple escala de récord que se produjo en la ciudad. El presidente del organismo público indicó que para llegar a este punto, una década después de aquellos poco más de 50.000 pasajeros que arribaban en A Coruña, ha sido necesario un enorme esfuerzo tanto por parte de la propia Autoridad Portuaria como por parte de consignatarias, turoperadores o instituciones públicas como la Xunta de Galicia.

“Actualmente el Puerto ha demostrado su capacidad para albergar grandes flujos de pasajeros en escalas múltiples y las navieras confían en nosotros”, destacó Enrique Losada, añadiendo que la prueba está en la posición de liderazgo que ocupa A Coruña en toda la cornisa cántabro-atlántica, a la cabeza tanto en escalas como pasajeros, por encima de puertos con gran tradición en el sector. El calendario para este año apunta a mantener estables las cifras alcanzadas hasta el momento y se espera otro salto en 2019, cuando podrán superarse los 190.000 pasajeros y 65.000 tripulantes en 130 escalas.

El presidente de la Autoridad Portuaria destacó también la importancia de la calidad en el servicio a los buques y a los pasajeros, que en las encuestas ensalzan tanto la belleza como la ubicación del entorno de los puntos de atraque. En este sentido, indicaba Enrique Losada que la remodelación del eje Marina-Parrote y el soterramiento del tráfico han resultado decisivos a la hora de valorizar el destino, en beneficio del sector del comercio, la hostelería y el turismo en general. Así, avanzó que se estima que “el impacto directo solo de hoy es de un millón de euros, como el pasado jueves, contabilizando los gastos de los pasajeros y los tripulantes, la incidencia en transportes, avituallamiento de los barcos o tasas”.