“Aprobamos un paquete de ayudas destinado a robustecer tres de las industrias agroalimentarias más potentes: la láctea, la cárnica y la hortofrutícola”, aseveró, precisando que este paquete supone una inyección de 25 millones de euros para responder positivamente a 59 empresas, que movilizarán un total de 70 millones de euros en el sector agroalimentario.

Feijóo destacó la relevancia estratégica de la industria agroalimentaria, no solo para crear y mantener puestos de trabajo sino también para mejorar la salida al mercado y dar valor añadido a los productos agrícolas, una de las claves para garantizar el futuro del rural. Y explicó que seis de cada diez euros de este paquete, es decir, 14,5 millones de euros irán destinados a apoyar 28 proyectos de inversión en el sector lácteo, lo que supondrá una movilización total de 38,3 millones de euros.

Entre estas iniciativas, el titular de la Xunta destacó dos proyectos: uno que tiene como objetivo diversificar la producción elaborando suero y leche en polvo y especializándose en la elaboración de mantequilla y queso; y otro que tiene como objetivo instalar torres de secado del suero que procede de la elaboración del queso.

En el sector cárnico, en el que se invertirán 4,6 millones de euros para 10 proyectos –con una movilización que asciende a los 13 millones-, Feijóo afirmó que estas iniciativas estarán encaminadas a modernizar y mejorar tecnológicamente mataderos, salas de despiece e industrias de elaborados cárnicos. Y, entre ellas, destacó la creación de un nuevo matadero de aves de producción ecológica.

Y, por último, se destinará una ayuda de 5,3 millones de euros a apoyar siete proyectos dentro del sector hortofrutícola, con el objetivo de movilizar una inversión de 14,7 millones. En esta línea, Feijóo se refirió al proyecto destinado a la creación de una industria de encausado de patatas para obtención de almidón destinado principalmente a la industria alimentaria.

Fuera de estos tres sectores, se aprobaron también ayudas para 14 proyectos más destinados a la fabricación de piensos, a la elaboración de miel, al procesado de huevos y a la elaboración de aguardiente.

“En definitiva, estamos a hablar de ayudas que han puesto de manifiesto que hay interés en invertir en medio rural, que hay ideas para industrializar el medio rural y que tenemos que seguir trabajando en esta línea”, concluyó.