Así lo señaló la directora xeral de Pesca, Acuicultura e Innovación Tecnológica, Mercedes Rodríguez, en la Comisión 8ª de Pesca e Marisqueo del Parlamento gallego, en respuesta a una pregunta relacionada con las medidas de la Xunta para potenciar el cultivo de mejillón. Un porcentaje que sigue en la misma línea que años anteriores. Así, en el año 2016, del total de los 1,7 millones concedidos para inversiones productivas en acuicultura, más del 80% fueron para el sector bateeiro, expuso Mercedes Rodríguez.

Además, la directora xeral explicó que en estos momentos se está resolviendo la convocatoria de 2018 y que “es previsible que el número de proyectos aprobados vinculados con el sector del mejillón supere al resto de especies acuícolas”. A la convocatoria de este año para apoyar las inversiones productivas, el incremento de la eficiencia energética y el fomento del uso de fuentes de energía renovables, así como los servicios de asesoramiento técnico, científico, jurídico, ambiental o económico en el ámbito de la acuicultura, la Xunta destina cerca de 18,7 millones de euros. Las ayudas están cofinanciadas con el Fondo Europeo Marítimo y de Pesca (FEMP).

Unas cifras que son una muestra de la apuesta y el apoyo de la Consellería do Mar al sector del mejillón, un sector, subrayó la directora xeral, que representa alrededor de dos tercios del valor de la producción acuícola gallega y que configura un conglomerado de empresas productoras, transformadoras y comercializadoras que generan unos 400 millones de euros de facturación. Unas cifras de facturación que, añadió Rodríguez, representan el 30% de la facturación de las sociedades mercantiles de los concellos del litoral gallego. Además los 10.000 empleos que genera el sector mitilicultor representan el 25% del empleo total en algunos de estos municipios.

En cuanto a los retos que debe afrontar el sector mejinollero, la directora xeral de Pesca, Acuicultura e Innovación Tecnológica citó la trazabilidad, la seguridad alimentaria, el conocimiento del origen del producto, el aporte de mayor valor añadido, el respeto medioambiental y la sostenibilidad.