Encuesta de Xera y la la Escuela de Ingeniería Forestal de la UVigo
La industria forestal prevé que la facturación caiga este año un 26% a causa del covid
Este es uno de los principales resultados de una encuesta realizada por la Escuela de Ingeniería Forestal de la Universidad de Vigo y la Axencia Galega dla Industria Forestal (Xera) a 117 empresas del sector y que ha sido presentada este lunes en el seminario virtual "Retos de la industria forestal post-COVID-19". En él se constató que la crisis sanitaria del coronavirus, que afectó negativamente al 95% de las empresas, provocó que la mayoría vieran retrasada su actividad, aunque no paralizada.
Las empresas participantes en la encuesta señalaron a la incertidumbre derivada de esta situación y a una hipotética caída de la demanda, como sus "principales preocupaciones", como explicó el director de la Escuela de Ingeniería Forestal, Juan Picos, en el seminario, que contó con las intervenciones del rector de la Universidad de Vigo, Manuel Reigosa, y del conselleiro de Economía, Emprego e Industria, Francisco Conde, del director de Xera, Ignacio Lema, y de representantes del sector maderero.
Esta encuesta fue realizada en la primera quincena de mayo y reúne las respuestas de empresas de diferentes subsectores, con una facturación conjunta de más de 800 millones de euros anuales. "Estamos hablando de un sector capilar para la economía de Galicia, proactivo y con futuro", sostuvo Picos.
En la apertura del seminario virtual, el rector de la UVigo recordó que "hablar de la industria forestal es hablar de una de nuestras fortalezas", aspecto en el que también incidió el conselleiro de Economía, que apuntó que, más allá de la crisis, la industria de la madera "puede tener muchísimas oportunidades", tanto en el campo de la "bioeconomía y del desarrollo de nuevos materiales", como a la hora de dar respuesta a la demanda de materiales sanitarios y de "transformación de espacios" a la que está obligando la crisis sanitaria. Francisco Conde subrayó en su intervención medidas específicas de apoyo al sector puestas en marcha por la Administración autonómica, como una nueva orden de ayudas por 500.000 euros para la celebración de cursos de formación u otras líneas ya vigetnes, como los apoyos para inversión en tecnología, procesado y comercialización de productos forestales.
Caída de un tercio de la facturación
El 98% de las empresas que participaron en el estudio afirmaron que esta crisis les afectó "negativamente o muy negativamente", lo que, como explicó Picos, permitió constatar que la situación generada por el covid-19 tuvo efectos negativos en el conjunto de la industria, "independientemente del tamaño de las empresas?, aunque también hubo casos de "empresas que vieron incrementada su demanda", en el caso concreto de los "subsectores" de la pasta de papel y de la biomasa. En lo referido a la actividad, sólo el 4% de las empresas encuestadas se vieron obligadas a parar, pero cerca del 70% vieron "como el trabajo disminuía mucho", mientras que sólo el 15% reconocieron mantener una actividad normal y un 2% afirmaron que incluso se incrementó en este período.
Con respeto a los efectos de la crisis en su facturación, el estudio sitúa en el 26% el descenso que las empresas prevén sufrir este año con respecto a 2019, mientras que, en relación al volumen de ingresos entre marzo y abril de este año y del año pasado, la media de descenso se sitúa en el 35%, "lo que supone una caída importante", como reconoció Picos. Pese a esto, "cerca de un tercio de las empresas asumen que van a mantener las inversiones" previstas para este ejercicio y un 7% incluso esperan incrementarlos, destacó el director de la Escuela de Ingeniería Forestal.
Preocupados por la caída de la demanda
En lo que se refiere a las "amenazas" que para esta industria supondrá la crisis, "la practica totalidad asume que la amenaza más grande es la incertidumbre" derivada de esta situación, siendo la caída de la demanda la segunda variable más destacada, por encima de la propia continuidad de la empresa. "Esto tiene mucho que ver con la filosofía del sector, no significa que no vaya haber problemas para la continuidad de las empresas, sino que es un sector mucho menos volátil que otros, que está aquí para quedarse y que hará lo posible para seguir funcionando?, destacó Picos. De hecho, preguntadas por si consideraban necesario llevar a cabo "algún cambio estratégico", el 64% de las empresas vieron necesario "reorientar su actividad", lo que muestra, añadió, que se trata "de un sector proactivo a la hora de buscar soluciones y alternativas".
La encuesta permitió conocer que el 46% de las empresas no solicitaron ninguna de las ayudas puestas en marcha por las diferentes administraciones, y que las que lo hicieron, optaron mayoritariamente, en el 60% de los casos, por los préstamos ICO. Sólo el 11% de las empresas encuestadas pusieron en marcha un Expediente Temporal de Regulación de Empleo, que, en el conjunto de la industria, fue solicitado por un total de 270 empresas, afectando a 228.450 trabajadores.
El estudio buscó asimismo conocer que medidas adoptaron las empresas del sector a causa de esta crisis sanitaria, de las que "una de las más relevantes fueron los cambios en la relación con clientes y proveedores, algo que probablemente tenga un impacto más a largo plazo", señaló Picos.
El director de la EE Forestal incidió por último en la importancia para el conjunto de la economía gallega de una industria "a la que le venden productos más de 80 sectores y subsectores y que compra a su vez a otros 60". En esa misma línea, puso el acento en el importante papel que la industria puede jugar a la hora de "ayudar a Galicia aprovechar el Green Deal europeo", lo cual le llevó a incidir en la necesidad de una política de apoyo a largo plazo que permita "articular la demanda" y garantice su continuidad, dado el papel que puede jugar en este "marco de transformación hacia una sociedad más alineada con el medio ambiente" impulsado desde la Unión Europea.