Según ha analizado el sindicato, a pesar del crecimiento continuo del PIB gallego en los últimos cinco años, la población trabajadora “non está a participar nesta mellora”. Así, y según recogen las estadísticas del IGE, la población asalariada perdió en una década, de 2008 a 2018, 256,22 millones de euros, mientras que el empresariado ganó en el mismo periodo 4.348 millones.  De hecho, si en 2008 el conjunto de asalariados gallegos recibía el 46,9% de la renta, y los empresarios el 45%, diez años después la población asalariada percibe el 42,4% y el empresariado el 47,9%. “O reparto do PIB empeorou para os salarios e, pola contra, a ganancia do excedente e das rendas mixtas en relación ao PIB foi considerable”, destacan desde UGT-Galicia.

Afiliaciones

Para el sindicato, una de las causas de esta realidad es un mercado laboral “de baixa calidade e moi precario, sen estabilidade e que, polo tanto, non permite consolidar uns ingresos dignos”. Para UGT-Galicia una manera muy gráfica de demostrar este contexto es con el “absurdo” flujo de entrada y salida del empleo. Así, para conseguir un nuevo afiliado a la Seguridad Social, teniendo en cuenta que la población en edad laboral se redujo en 10 años en 34.600 personas, son necesarios 183 movimientos en la Seguridad Social. De hecho, entre 2014 y 2018 la Seguridad Social registró en Galicia 7.341.234 altas en los diferentes regímenes del sistema. En el mismo periodo se registraron 7.252.811 bajas. Dos datos que, para el sindicato, demuestran la  “ irracionalidade do modelo de relacións laborais que impera en Galicia”.