El documento analiza el interés inversor de las sociedades de capital privado (Private Equity) en el tejido empresarial gallego, y por primera vez, expone el punto de vista de las empresas gallegas sobre las expectativas de crecimiento económico de la Comunidad. A su presentación acudió el conselleiro de Economía, Emprego e Industria, Francisco Conde, quien destacó "el esfuerzo de Galicia por hacer de la innovación y la formación señales de identidad, un compromiso por parte de todos os agentes que permite que la Comunidade pueda atraer nuevas inversiones".

Aumenta el interés por invertir en Galicia

Según señala el informe, los datos oficiales del pasado ejercicio de ASCRI (Asociación Española de Capital, Crecimiento e Inversión) todavía no recogen operaciones concretas por comunidades autónomas. Hay que irse a 2018, un año flojo en cuanto a número (46 transacciones), pero algo más elevado en volumen (66 millones de euros) respecto a un año antes. Estas cifras colocan a Galicia como octava comunidad autónoma con más operaciones de este tipo, en un ranking que encabeza la Comunidad de Madrid.

De la encuesta realizada por BDO entre las entidades de inversión que operan en España se constata que en 2019, el apetito de las firmas de private equity por invertir en el tejido empresarial de Galicia aumentó respecto a un año antes. El 81% de estas sociedades de inversión analizó alguna oportunidad de compra frente al 72 % que lo hizo en 2018.

Razones para no cerrar una operación

Los principales argumentos que esgrime el private equity para no cerrar una operación son la falta de entendimiento con el management, el atractivo de la empresa, el precio y el tamaño, entre otros. A diferencia de la edición anterior, las discrepancias en la valoración del activo representan, en esta edición del informe, la tercera barrera de entrada, frente a la última posición en la que figuraba en la anterior edición. 

Tanto para los Private Equity como para las empresas es crucial ganar tamaño para competir y la vía corporativa se presenta como una palanca de crecimiento más ágil, que les brinda la posibilidad de posicionarse como líderes en consolidación sectorial. Unas operaciones que, tal y como reconocen ambos actores, no se pueden llevar a cabo sin la presencia de un asesor financiero independiente que haga de facilitador de la transacción de una forma rápida y transparente

Por tanto, no es una cuestión de falta de oportunidades, como también dejan claro los que no han estudiado ningún tipo de movimiento corporativo, que apelan al reducido tamaño del tejido empresarial y la falta de atractivo del mismo, sino de encontrarlas. La frase “Galicia es una gran desconocida” suena en boca tanto de empresarios como de inversores.

De hecho, entre las compañías gallegas participantes también hay intención de abordar operaciones de fusiones y/o adquisiciones a lo largo del presente ejercicio para ganar tamaño, tal y como lo reconoce el 47,3%. Es más, casi el 73,7% cree que habrá un número similar de operaciones en 2020 que en años anteriores y un 10,5% estima que se elevará la cantidad de movimientos corporativos.

Sectores en los que invertir

Otra de las conclusiones del estudio de BDO realizado entre las firmas de Private Equity revela que el sector energético ha escalado posiciones respecto a otras ediciones y se coloca como el tercer mercado más atractivo en el que invertir, por detrás de la alimentación y de las TIC y por delante del textil y confección y salud y deporte. La automoción ha perdido la tercera plaza y se coloca en quinto lugar.

Expectativas de crecimiento

La percepción que tienen las sociedades de capital privado sobre la economía es optimista. Así, el 55% opina que el crecimiento de Galicia será bueno a lo largo de este año. Por su parte, las empresas gallegas consultadas no se muestran tan positivas y casi el 85% considera que las perspectivas son regulares. Ahora bien, preguntadas por sus expectativas de evolución de ingresos, el 63,2% afirma que aumentarán y el 31,6%, que se mantendrán. Solo el 5,2% cree que disminuirán.

La encuesta se hizo sobre una selección de compañías representativas del tejido industrial gallego que se caracterizan por su liderazgo sectorial, su apuesta por la innovación y su vocación internacional.