Son cifras del informe anual de actividad del Consello Regulador da Agricultura Ecolóxica de Galicia (Craega), que presentó este martes en Boqueixón el presidente de la entidad, Francisco López Valladares, el conselleiro de Medio Rural en funciones, José González, y el director de la Axencia Galega da Calidade Alimentaria (Agacal), Manuel Rodríguez. 

"As cifras avalan o labor deste Consello ano tras ano. A demanda, cada vez maior, de produtos ecolóxicos disparou as vendas en taxas de dous díxitos e o volume acada xa os 92,7 millóns de euros. Aínda que en menor medida, medran tamén outras variables: a superficie e os operadores", destacó Valladares.

El presidente del Craega aprovechó la intervención para difundir los resultados de una encuesta interna sobre los efectos de la covid-19 en el sector. "Aínda que houbo excepcións, case o 54% dos enquisados diminuíron a súa facturación por mor da pandemia. As vendas caeron de forma significativa: catro de cada dez reduciron as súas transaccións á metade ou incluso máis", señaló.

El informe también deja claro que la crisis del coronavirus dio el empujón definitivo a la venta online en el sector ecológico. El 89% de los encuestados no disponía de este servicio antes de la pandemia, pero un 12,3% lo puso en marcha durante el estado de alarma. Ahora, a la vista del escenario actual, tres de cada diez han previsto activar la venta online a corto-medio plazo.

En cuanto a la recuperación, la mitad de los operadores ecológicos confía en que su negocio se reponga en 2021 y un 37,5% adelanta la superación de la crisis al segundo semestre del año.

Además de celebrar los datos, el conselleiro de Medio Rural en funciones manifestó la voluntad de la Xunta en "colaborar nesta liña que vai moi ligada á sustentabilidade medioambiental que propugna a UE". En este sentido, destacó que se va a cerrar "un acordo co Craega para que a produción agraria e gandeira de todas as aldeas modelo de Galicia sexa certificada en ecolóxico", lo que demuestra el "compromiso firme" del Gobierno gallego por este campo.

Además, a juicio de José González, los datos demuestran que la agricultura ecológica no sólo es una "actividade que xera riqueza e emprego no noso agro", sino también una "aposta por unha produción sustentable e respectuosa co medio ambiente, que encaixa perfectamente cos principios reitores da futura PAC”.

Datos de superficie, productores y ventas

Con un incremento anual de un 2,9%, la superficie certificada llegó en 2019 a las 34.378,12 hectáreas. En la última década la extensión dedicada al ecológico aumentó en Galicia un 143,9%. Por tipo de cultivo, los pastos permanentes anotan el progreso más importante. Con un ascenso anual de un 7,69%, representan el 79% de la superficie certificada. Cuatro de cada diez ha dedicadas a cultivos permanentes se destinan a la castaña. Casi toda su producción (93,7%) se concentra en la provincia de Lugo.

2019 se cerró con 30 operadores más que el año anterior, lo que sitúa la cifra total en 1.182. Son 17 elaboradores y comercializadores y 13 productores más. Aunque es este último segmento el que continúa llevando el peso del Craega (supone el 74,2%), son las industrias las que más empujan el crecimiento del Consello. En la última década casi se cuadriplicaron y hoy representan ya el 25,7% de los inscritos gracias sobre todo al tirón de las empresas que se dedican a vender producto ecológico. Sin ir más lejos las comercializadoras crecieron en el ejercicio precedente cerca de un 35%.

Vegetal, con 435 operadores, y animal, con otros 395, se mantienen como cabeza tractora del sector ecológico gallego, pero desde 2012 vienen empujando con fuerza otros subsectores vinculados al mar. Con 13 inscritos, la cosecha sostenible de algas anota una suba de un 18% con respeto al curso anterior.

El análisis por distribución geográfica deja patente los dos polos económicos de la comunidad: en Lugo y Ourense se localizan el 57% de los productores, mientras que en las atlánticas se encuentran el 58,5% de los comercializadores y elaboradores.

Con la producción manteniéndose en niveles de crecimiento sostenido y las industrias y comercializadoras en plena expansión, las ventas certificadas marcaron en 2019 un nuevo máximo histórico. La facturación llegó hasta los 92,7 millones de euros, cifra que supone un incremento anual de un 17,88%. Por subsectores, los que más ingresos generan son, por orden, animal (56,5 millones); vegetal (21,6 millones) y acuicultura (14,4 millones). 

En el extremo contrario de la tabla se sitúan los cereales, producto con mayor caída en ventas certificadas (-96,59%) debido la que en 2019 no se registró importación de terceros países. Tampoco fue un buen año para la castaña; su facturación bajó un 43,08% por la escasez de lluvias.