En plena crisis sanitaria, el movimiento en el conjunto del sistema portuario español cayó un 10%, debido a la paralización de buena parte de la actividad económica, y solo seis puertos pudieron mejorar los registros de abril de 2019. De ellos, el Puerto de A Coruña fue el que obtuvo el mayor crecimiento, al pasar de 919.081 a 1.155.556 toneladas.

Destacaron en este sentido los incrementos en graneles líquidos, especialmente en el petróleo que abastece a la refinería de Repsol, y, en el apartado de graneles sólidos, el maíz, los piensos y el clínquer, que en un amplio porcentaje se cargaron y descargaron en el Puerto Exterior. También mejoraron las cifras de pesca fresca y marisco, con 2.696 toneladas. El tráfico de cruceros fue nulo, como consecuencia de su prohibición a nivel estatal salvo circunstancias extraordinarias.

El presidente de la Autoridad Portuaria, Enrique Losada, señaló que estos resultados vienen a poner de manifiesto "la excelente coordinación" que se logró en el Puerto coruñés ante las medidas excepcionales que se adoptaron a raíz de la pandemia causada por el coronavirus. 

Datos hasta abril

En el conjunto del cuatrimestre, desde enero hasta abril, los tráficos del Puerto de A Coruña muestran un balance negativo, debido fundamentalmente a la pérdida de tráficos como carbón y alúmina, motivada por los ceses de la actividad en la central térmica de Meirama y en la factoría de la antigua Alcoa.

No obstante, el conjunto de los tráficos se han ido recuperando en marzo y en abril, con una destacada actividad en el Puerto Exterior. Las instalaciones de Punta Langosteira albergaron en abril operaciones de carga y descarga de graneles sólidos que sumaron 140.000 toneladas, lo que supone un 60% del movimiento total de este sector en el conjunto del Puerto de A Coruña.