Consejos para invertir tus ahorros en 2021
Los depósitos bancarios son el recurso tradicional del ahorrador que quiere tener su dinero disponible y no asumir ningún riesgo. El problema es que en los últimos años la mayor parte de los depósitos que ofrecen los bancos españoles están ofreciendo unos reducidos tipos de interés. Según los datos del Banco de España, el interés medio de un depósito a plazo fijo de hasta un año se situó el pasado mes de noviembre en el 0,11%.
Es por ello que cada vez son más los ahorradores que dan el salto a la inversión, con la esperanza de que su dinero trabaje solo y les genere más capital. Evidentemente, invertir implica asumir un riesgo, pero este riesgo puede minimizarse siguiendo una serie de consejos y teniendo siempre presente que invertir no significa jugar al azar.
Lo primero que debe hacer una persona que quiera invertir parte de su dinero es determinar cuál es su perfil inversor. Esto significa evaluar cuál es su situación financiera actual, cuáles son sus objetivos financieros, cuál el horizonte temporal que busca para su inversión, cómo es su personalidad y tolerancia al riesgo y cuáles son sus conocimientos financieros.
También es importante elegir el producto adecuado, ya sea invertir en bolsa, en el mercado de divisas, en fondos de inversión, etc. Puede parecer complicado, pero una vez definido el perfil de inversión, será más fácil escoger los productos que más se adapten a cada uno. Por ejemplo, un perfil inversor arriesgado acudirá probablemente a los mercados bursátiles y a productos derivados; sin embargo un perfil conservador quizá prefiera comprar bonos del Estado o cualquier otro producto de renta fija.
Otro de los consejos es conocer en qué estás invirtiendo. No hace falta ser un experto, sino tener unos conocimientos mínimos de cómo funcionan los mercados y de los diferentes productos que vas a contratar, sabiendo siempre cuáles son sus características esenciales y los riesgos asociados. En este sentido, en Internet hay una gran cantidad de recursos; por ejemplo, si lo que nos interesa es invertir en divisas, es aconsejable consultar periodicamente un calendario económico para estar al día de las novedades en los mercados y cómo pueden influir estas en los precios de las divisas. Otra opción es formarse; por ejemplo, la Universidad de Vigo ha convocado una nueva edición de su curso de introducción a la bolsa abierto también a personas ajenas a la comunidad universitaria.
Teniendo claro nuestro perfil como inversor y sabiendo en qué queremos invertir el siguiente paso es decidir con qué gestor o broker operar. Consultando en la web de la Comisión Nacional del Mercado de Valores podemos comprobar que el intermediario está autorizado y registrado y no se trata de ningún chiringuito financiero. Dejar en manos de un profesional nuestras operaciones inversoras nos evitará tener que estar tomando decisiones en el día a día pero eso no obsta para hacer seguimiento de las operaciones y preguntar a la entidad gestora o broker siempre que tengamos dudas.
Otra recomendación básica a la hora de invertir nuestros ahorros es diversificar. La tan conocida sentencia de “no poner todos los huevos en la misma cesta” es, en el mundo inversor, una regla de oro. Invertir en diferentes productos financieros, que no estén correlacionados entre sí, con distintos horizontes temporales y hacer aportaciones en diferentes momentos -en vez de una única aportación- son las claves para minimizar los riesgos del mercado. Así, en el largo plazo, las posibles pérdidas en que puedan incurrir algunos de los productos contratados se compensarán con las ganancias que nos proporcionen otros activos y las caídas de la bolsa con las subidas. En definitiva, diversificar te permitirá maximizar la rentabilidad de tus inversiones y minimizar (que no eliminar) los riesgos.
Finalmente, otro aspecto que debemos considerar cuando vayamos a invertir nuestro dinero es conocer el tratamiento fiscal de cada producto. Como norma general, tener acciones o participaciones en fondos de inversión no supone pagar impuestos, salvo en el momento en que vendas las acciones o las participaciones. Entonces las ganancias obtenidas deberás declararlas en tu declaración de la Renta del año siguiente a la operación de venta. Si simplemente quieres traspasar dinero de un fondo a otro no tendrás que tributar por ello.
Como habrás podido comprobar, las decisiones que tomes con respecto a tus inversiones son importantes y merecen una reflexión pausada, ya que influirán no solo en tu situación financiera presente, sino también en la futura.