Los datos se desprenden de los resultados del “Barómetro de Economía” del primer semestre de 2019 elaborado por el Consello Galego de Economistas. El estudio recoge la opinión del colectivo de colegiados economistas gallegos en relación a parámetros clave de la economía provincial, regional y nacional. El trabajo destaca por su actualidad puesto que se realizó entre la última quincena de junio y la primera semana de julio.

Los economistas de Lugo, con un 68,7%, se posiciona como la más negativa seguida por A Coruña, con un 66,6%, mientras que los economistas de Ourense rebajan la percepción crítica hasta el 49%.  Por su parte, los colegiados de Pontevedra se muestran como los más optimistas con un 29,3% al considerar que “seguirá en los parámetros actuales”.

En el acto de presentación del Barómetro, celebrado en la sede del Círculo de Empresarios en Vigo, participaron la directora del estudio, María Jesús Freire Seoane, profesora titular del departamento de Análisis Económico en la Facultad de Economía y Empresa de la Universidad de A Coruña, el presidente del Consello Galego de Economistas, Miguel Vázquez Taín, y el decano del Colegio de Economistas de Pontevedra y vicepresidente del Consello, Carlos Mantilla Rodriguez.

Cabe señalar que son los trabajadores de la industria (88,6), administración pública (82,9) y servicios (82,7) quienes perciben la economía de manera más negativa. Las respuestas de los trabajadores procedentes de la banca (27,8%) y de la consultoría (19,1%) son ligeramente más optimistas y opinan que la economía seguirá en situación similar.

Un 54,% de los economistas encuestados creen que la economía está igual que el año anterior, el 20,8% afirma que está peor y el 22,7% asegura que ha mejorado. Son los colegiados que trabajan en el  sector de la construcción, banca y servicios los que tienen una percepción más positiva sobre la evolución económica, mientras que jubilados y asalariados del sector privado se muestran más negativos, 26,6% y 22% respectivamente.

Por último, los colegiados de A Coruña (25,6%) son los más positivos sobre la percepción económica provincial y los de Pontevedra se destacan por considerar que está igual al año pasado (65,2%).

El problema de los precios

Las tensiones inflacionistas y la evolución de los precios ha sido uno de los temas suscitados en el presente análisis de la situación económica. Sobre esta cuestión, la mayoría de los profesionales (54,1%) declaran que “están estabilizados, pero en algunos productos se perciben subidas destacadas”. Los colegiados de Lugo (73,4%) son los más rotundos en la valoración sobre la estabilidad de los precios, seguidos de Pontevedra (55,4%), Ourense (54,9%) y A Coruña (44,4%). Son los colectivos de jubilados y asalariados del sector público los más críticos con la estabilidad de los precios.

Mercado de la vivienda

El primer Barómetro de 2019 también ha consultado a los profesionales sobre la vivienda. La opinión mayoritaria es que el mercado de la vivienda se está revitalizando, si bien los precios suben solo en zonas muy concretas (43%). Por su parte, el 29,9% considera que los precios empiezan a subir de modo generalizado y el 6,8% sostiene que el mercado permanece congelado. La posición optimista sobre la revitalización del mercado de la vivienda se localiza preferentemente en las provincias de Ourense (82,6%) y A Coruña (77,7%).

El paro y la dimensión empresarial, principales problemas

Para los profesionales de la economía, el paro (60%) y la dimensión de las empresas gallegas (50%) ocupan los lugares prioritarios de los problemas de la economía. E incluso incrementa porcentualmente el nivel de preocupación respecto de anteriores barómetros. El tercer lugar lo ocupa el déficit de infraestructuras y comunicaciones, con un 46% de los entrevistados. Este problema es especialmente acuciante para los colegiados de Lugo (67%).

Al igual que en anteriores análisis, la mejora del sistema educativo (8,6 sobre 10), seguido de la creación de nuevos nichos de empleo (8 sobre 10) o la captación de inversión extranjera (7,8 sobre 10) son las opciones más valoradas para fomentar el empleo y lograr un reforzamiento del tejido empresarial de Galicia.