Este certamen, orientado al público gallego y portugués que esté interesado en vehículos de ocasión y liquidación de stocks de los concesionarios oficiales, ocupa 10.000 metros cuadrados y permite reunir más de 700 vehículos de la práctica totalidad de las marcas destacadas del mercado nacional.

La dinámica del salón, donde los coches vendidos se van sustituyendo cada día por nuevas ofertas de los concesionarios, permite una amplia oferta permanente, por la que los visitantes pueden valorar diferentes modelos y sobre todo encontrar grandes descuentos en el precio de venta, tal y como ha acontecido en las anteriores ediciones.

Al ser un certamen de final de año, los concesionarios aprovechan para dar salida a vehículos propios y especialmente a stocks de otras marcas que se hayan entregado como descuento por la compra de vehículos propios. Es pues una gran oportunidad para conseguir un automóvil.

Los diferentes concesionarios oficiales mantienen durante la feria una red de asesores que informan de las características de los modelos al público interesado, así como de otros aspectos como financiación, garantía o posibles extras.