Seminario de la Fundación Naturgy en Santiago de Compostela sobre generación eléctrica distribuida
Unas redes eléctricas tecnificadas y digitalizadas serán un elemento clave en la transición energética
Santiago de Compostela acogió una jornada de la Fundación Naturgy en la que analizó el impacto de la descentralización de la generación en el modelo energético, el papel activo del usuario final y la perspectiva de futuro del proceso de producción desde múltiples puntos y lo más cerca posible del consumidor.
El director de Redes de Electricidad de España de Naturgy, Raúl Suárez, apostó por configurar las redes de distribución como un elemento clave en la transición energética. “Sin una red de distribución tecnológicamente muy avanzada no será posible optimizar la integración de la generación renovable y desarrollar una verdadera transición energética”, declaró. Para ello, Suárez considera necesario una mayor tecnificación. “Es preciso que el nuevo marco retributivo dé señales de rentabilidad suficiente y estable a las inversiones en redes, en especial a las inversiones en digitalización”.
Suárez hizo estas declaraciones en un seminario sobre generación eléctrica distribuida, organizado por la Fundación Naturgy en Santiago de Compostela, donde explicó que “el PNIEC dibuja un ecosistema eléctrico en el horizonte 2030 caracterizado por un 74% de la energía producida de origen renovable y un mix de generación en el que más del 70% de la potencia instalada será renovable, no firme y altamente distribuida”.
El directivo afirmó que “la alta capilaridad de una parte relevante del mix de generación, unida al papel más activo de los usuarios, con el autoconsumo, la gestión de la demanda o la recarga del vehículo eléctrico, tendrán un gran impacto en la configuración y explotación de las redes de distribución”.
“Las redes de distribución españolas son un caso de éxito a nivel europeo, pero para afrontar este reto deberán tecnificarse y digitalizarse más aún, con el fin de dar respuesta a la flexibilidad que requiere gestionar un sistema con flujos de energía mucho más dinámicos y para maximizar la capacidad de integración de la generación renovable a costes reducidos y más cerca de los puntos de consumo”, explicó Suárez.
Puesta en común del mundo académico y empresarial
Expertos de la Universidad de Comillas, OMIE, REE, Wattia, CLECE, Evohaus e InnoEnergy compartieron casos prácticos y experiencias sobre la regulación, aspectos ambientales y el grado de implantación en España y en Europa de la generación eléctrica distribuida, el proceso de producción de energía desde múltiples puntos y lo más cerca posible del consumidor final.
Pablo Frías, profesor del Instituto de Tecnología de la Universidad de Comillas, explicó que países como Austria o Alemania llevan más de un siglo conviviendo con esta generación dispersa, sin embargo, su irrupción en otros países sin esta experiencia previa está suponiendo un auténtico reto”. En cuanto a la regulación, Frías explicó ejemplos aplicados en Europa que pueden servir para ayudar a diseñar el marco general. “Cada país, entre ellos España, está redefiniendo su propia regulación para poder integrar de forma eficiente, económica y técnicamente, esta nueva modalidad de generación”, apuntó.
El director de Seguimiento del Mercado de OMIE, Juan Bogas, se refirió al desarrollo de la generación eléctrica distribuida y al cambio significativo de la curva de carga, tanto a nivel centralizado como descentralizado que implican los compromisos de Acción por el Clima de la COP 21, los Objetivos 2030, y los Planes Nacionales Integrados de Energía y Clima de España y Portugal, unido al impulso del autoconsumo en la nueva Directiva de Electricidad. “El mercado va a implementar los cambios necesarios para permitir la participación de los nuevos actores, incluso a tan solo 15 minutos del suministro, y va a permitir la gestión de los recursos de los consumidores finales a través de los agregadores, para optimizar su factura eléctrica”, señaló.
Por su parte Jorge Hidalgo, responsable de Apoyo a Operaciones del CECORE de Red Eléctrica de España (REE), puso en valor la mayor descentralización de los recursos de generación y la mayor flexibilidad del sistema eléctrico para satisfacer la demanda que implica la generación distribuida. “Resulta fundamental mantener el actual nivel de observación de la producción renovable, con el fin de mantener una operación segura y eficiente del sistema eléctrico mediante unos modelos de previsión de la producción renovable y de demanda tan precisos como lo permita la tecnología”.
Emérito Freire, director del Departamento de Energía y Planificación Energética del Instituto Enerxético de Galicia (INEGA), que participó en la sesión inaugural del seminario, afirmó que “la integración masiva de renovables sólo es posible con un cambio de modelo energético y que éste se convierta en bidireccional”.
La jornada dedicó también una mesa redonda a poner en común ejemplos de aplicación de generación distribuida en el sector residencial, terciario y de barrio de España. Fue el caso del proyecto EspaiZero, primer centro estatal 100% autosuficiente energéticamente con fuentes renovables y galardonado con el Premio AEE Spain Chapter 2018; el complejo Cuzco, sede del Ministerio de Industria, Comercio y Turismo, y del Ministerio de Economía y Empresa; el Centro Hospitalario Universitario de Santiago de Compostela y el conocido como distrito energético (Near Zero Emission).
Por su parte, el director de Energía, Tecnología y Medio Ambiente de la Fundación Naturgy, Manuel Calvo, destacó la importancia de este tipo de jornadas, porque “la generación distribuida supone una gran oportunidad y un gran reto que implica a muchos actores del sistema eléctrico, y por ello es necesario tenerlos en cuenta a todos para asegurar el éxito de este nuevo modelo”. Este seminario forma parte de las actividades de formación que la Fundación Naturgy realiza en distintas ciudades españolas sobre temáticas relacionadas con la energía, la tecnología y el medio ambiente.