Se trata de una cifra de afluencia de público similar a la muestra del año 2017, cuyo dato es satisfactorio para la organización. 

Respecto a la comercialización de vehículos,  la feria termina esta cita con un saldo de ventas de más de 250 unidades, entre los coches efectivamente vendidos y ya pagados, y las estimaciones de los que se han apalabrado para cerrar la operación en el concesionario.

Esto supone una destacada proporción del total de coches expuestos en el recinto ferial y alenta a seguir organizando este tipo de eventos, pues es una forma de activar el mercado de ocasión de las empresas concesionarias oficiales de las marcas.

Estos datos, además, confirman las expectativas que había sobre esta edición, pues hasta el mes de octubre la demanda de vehículos de ocasión en Galicia ha crecido un 5%, según datos divulgados en su momento por la patronal.

El director del certamen, José Enrique Elvira, valoró que "los vehículos de ocasión siguen siendo muy atractivos para el público pues con poco kilometraje se accede a unidades en muy buen estado". Elvira resaltó "la importancia que tienen estas ferias para dinamizar el mercado de la distribución, y más en un año como este en el que diversos acontecimientos, como la nueva norma de emisiones, han saturado los concesionarios de coches que no podían vender como nuevos".