Mesa redonda en la Facultad de Ciencias Económicas y Empresariales de la Universidad de Vigo
Japón, un mercado "atractivo y con futuro" para las empresas gallegas
La Facultad de Ciencias Económicas y Empresariales de la Universidad de Vigo acogió este miércoles una mesa redonda en la que se pusieron sobre la mesa las principales oportunidades de negocio e inversión que ofrece a día de hoy un país, Japón, que, pese a sus altos índices de envejecimiento, sigue siendo referencia fundamental de la economía asiática. Un país con cuatro veces el PIB español y una población de 128 millones de habitantes, y con el que, además, la Unión Europea tiene un acuerdo de libre comercio en vigor desde hace dos años.
En la jornada, que tuvo seguimiento presencial y online, se habló de como es el mercado japonés, que lo caracteriza y que requisitos deben cumplirse sí se quiere introducirse con éxito y conseguir acuerdos a largo plazo. Moderados por Pedro Mouriño, director del Foro de Internacionalización del Círculo de Empresarios de Galicia, la mesa redonda se abrió con un saludo de bienvenida del rector de la Universidad de Vigo, Manuel Reigosa, y la lectura de una carta del embajador de Japón en España, Kenji Hiramatsu.
Después intervino el catedrático de Economía Aplicada de la Universidad de Vigo, Xosé Carlos Arias, que hizo un dibujo de la situación macroeconómica japonesa, una perspectiva en la que mostró un entorno bastante hostil para el comercio internacional, algo habitual en momentos de crisis económica como el actual, en los que el multilateralismo comercial pierde peso en favor de los acuerdos bilaterales. Frente a esta visión pesimista que se está imponiendo a nivel global, Arias quiso también dejar una puerta abierta a la esperanza, recordando que “también en el 2008-2009 había estas sensaciones y, finalmente, no se cumplieron”, a lo que añadió que, “en la actualidad, con la pandemia y el cambio climático, se hizo más patente que nunca la necesidad de cooperación internacional”.
La inmersión directa en el mercado japonés llegó de la mano de Pedro Cordero, coordinador de proyectos de Jetro, la principal organización de comercio exterior de Japón. En su exposición, Cordero describió Japón como un mercado “atractivo con mucho futuro” para las empresas españolas, sobre todo para aquellas que quieran establecer una relación fructífera y a largo plazo “pues si algo no gusta al empresariado japonés son los pelotazos”. Japón puede ser, además “la plataforma perfecta para dar el salto a Asia-Pacífico”, añadió.
En cuanto a los sectores con más posibilidades de éxito, señaló que el Gobierno japonés apuesta como sectores estratégicos para lograr el cambio verde y digital los relacionados con la energía, el transporte y las manufacturas, y las oficinas y viviendas, incluyendo aquí diferentes cuestiones relacionadas con los estilos de vida. El representante de Jetro puntualizó, a partir de los casos de startups japonesas con más éxito, que tendrán futuro las iniciativas relacionadas con la inteligencia artificial, internet de las cosas, energías renovables, nuevos materiales, salud y robótica, entre otras.
Cómo hacer negocios en Japón
Fruto de la experiencia de más de veinte años como alto directivo de una multinacional japonesa, Tomás Zumárraga, director general de Shacho Kai, asociación que engloba a las empresas en España con capital japonés, acercó algunos consejos que deben tenerse en cuenta a la hora de hacer negocios con este país. “Antes de nada lo que os recomendaría es visitar este país, ver de cerca su cultura, monumentos y, sobre todo, sus personas, pues vais a descubrir una sociedad increíblemente especial y respetuosa que nada tiene que ver con la española, mucho más imbuida de esa cultura del pelotazo, antes mencionada, y que ellos tanto rechazan”.
La importancia de la transparencia para generar confianza, la capacidad demostrada para generar mejoras, las afirmaciones siempre apoyadas en datos y cifras, el gusto por la puntualidad y por cumplir los horarios con rigidez, la necesidad de implicación en un proyecto de todas las partes que lo conforman desde que nace hasta que se ponen en marcha... fueron sólo algunos ejemplos puestos sobre la mesa por Zumárraga para lograr que las relaciones con un empresario japonés lleguen a buen puerto. “Tienes que tener un producto o servicio que sea capaz de demostrarles que tú vas a generarle valor a largo plazo”, reseñó.
El ejemplo de la firma gallega de moda D-Due
El ejemplo de éxito empresarial en la relación España-Japón llegó de la mano de la empresa de moda gallega D-Due, con sede en Rianxo. Rosario Froján y Alfredo Olmedo, socios-directores de la firma, expusieron su propia experiencia en el trato con el empresariado japonés. ”Nuestros clientes en este país son tremendamente respetuosos, muy cuidados y cariñosos”, destacó Olmedo, quien, al igual que Froján, puso sobre la mesa toda una serie de elogios hacia el mundo japonés. “Tienen una sensibilidad muy propia, mucha personalidad y muchísimos valores que están muy por encima del dinero, independientemente de que siempre estén vigilantes con la evolución del mercado y las últimas innovaciones”, recalcaron los empresarios.