Cuando los hermanos Cebrián, después de un viaje a Londres, deciden montar El Ganso, se enfrentan a una difícil decisión: la de dejar un empleo estable y lanzarse a esta aventura. En Londres vieron que el estilo de ropa británica podría tener éxito dándole un toque distinto, más fresco y colorido.

Clemente Cebrián, uno de los fundadores de la firma textil, relató a los jóvenes empresarios ourensanos los inicios de El Ganso, las dificultades que fueron encontrándose en el camino y los proyectos de futuro. Después de pedir un crédito de 20.000 euros para empezar, a lo que tuvo que sumar la venta del coche, hoy en día la empresa se ha convertido en un referente que, tras algo más de una década, cuenta con 200 tiendas repartidas por todo el mundo.

Aunque hace poco que tienen detrás el respaldo de un gran grupo como Louis Vuitton, los hermanos Cebrián conservan en ella la esencia de marca de empresa familiar, su identidad y vivencias. En El Ganso afrontan el futuro manteniéndose como una marca local, aseguraba Clemente en su desayuno, y especificaba como parte fundamental para avanzar la escucha activa del cliente, estar a pie de calle y estudiar las reacciones de la gente.

Cebrián compartió las experiencias de su trayectoria empresarial con un grupo de jóvenes de AJE Ourense, entidad que organiza este tipo de encuentros para conocer de primera mano los casos de éxito en distintos sectores empresariales.