Alfredo Ramos, director de R, presentó la Xornada, que también pudo seguirse por vía online, ante un auditorio de cerca de 120 representantes empresariales e institucionales, con el foco puesto en esas grandes oportunidades de los nuevos tiempos: “En R, explicó, hemos iniciado una nueva etapa llena de posibilidades y no perdemos el foco del cliente, que está cambiando su manera de consumir. La digitalización tiene que tener siempre un porqué; se trata de mejorar el modelo de relación con los clientes y los procesos de toma de decisiones, de empoderar a los empleados, aportar valor y aumentar la productividad y la competitividad”.

Josep Piqué, experto invitado este año en la Xornada en calidad de economista, conferenciante internacional en dirección de empresas y consejero delegado de diversas compañías tecnológicas, señaló que "estamos viviendo una auténtica revolución”. Esta es la primera idea que Josep Piqué puso sobre la mesa de debate, incidiendo en la necesidad de “detenernos en dos grandes transformaciones: la digital y la ecológica”.

Comenzó su relato Piqué haciendo una profunda reflexión sobre el actual escenario geopolítico, consecuencia del orden mundial gestado después de la Segunda Guerra Mundial. “Tras décadas en las que el planeta se mantuvo dividido en dos grandes bloques, actualmente se erige China como gran potencia y adversaria sistémica de Estados Unidos. Y ambas se disputan las nuevas tecnologías porque, a día de hoy, la superioridad tecnológiça es la superioridad militar”. Desde el punto de vista económico, y en alusión directa a las consecuencias de la pandemia, Piqué se refirió al desajuste entre la oferta y la demanda, y a la disminución de la producción en muchos sectores, lo que exige soluciones que, en gran parte, pueden ofrecer los fondos Next Generation siempre y cuando se conciban con la finalidad de invertir y financiar nuestro futuro. “Tenemos que aprovecharlos para cambiar nuestro sistema productivo porque no son un maná caído del cielo”.

Piqué destacó también la importancia estratégica para las empresas y para los países de invertir en tecnología y el papel clave de la colaboración público-privada para conseguir la digitalización de compañías y administraciones y no quedarse atrás. Aseguró, así mismo, que la incidencia de la tecnología es total en la evolución del escenario global desde el punto de vista geopolítico, como así ha sucedido siempre a lo largo de la historia. Analizó de qué manera la tecnología está repercutiendo en el panorama geopolítico de un mundo globalizado, donde la digitalización ya no es una opción sino una realidad necesaria para permanecer en el mercado; y las personas responsables de la empresa han de asumir el reto y transmitir esta cultura al conjunto de la organización.

“O somos digitales, o el mercado nos va a triturar”, aseguró Josep Piqué. Por eso, hay que adaptar los procesos y productos a tecnologías como la Inteligencia Artificial o a la utilización de redes de transmisión como el 5G. “Cuando hablamos de digitalización, hablamos de la nueva materia prima, de un nuevo petróleo, que son los datos. La gestión de los datos se ha convertido en fundamental”, aseguró. Al tiempo, Piqué llamó la atención sobre los riesgos asociados a las tecnologías digitales: preocupación por la privacidad y gestión de los datos, ética sobre su propiedad o ciberataques.

Y tampoco olvidó el conferenciante su referencia detenida a la necesidad de que las empresas sean sostenibles y respetuosas con el medio ambiente a todos los niveles. “Los gases de efecto invernadero no tienen fronteras”, aseguró. Por eso también en este campo, como en el económico y el tecnológico, es imprescindible generar alianzas con proveedores estratégicos.

Los grandes desafíos de la coyuntura actual

Josep Piqué se unió igualmente a la mesa profesional “Éxito, retos y oportunidades de la situación actual”, moderada por Xosé Luis Vilela, director de La Voz de Galicia, donde Isidro Fernández de la Calle, director de empresas de R, puso el acento en la importancia de las alianzas estratégicas: “En R somos conscientes de estar viviendo un momento excepcional y una gran oportunidad. La pandemia lo ha acelerado todo pero en R estábamos muy bien preparados y hemos podido acompañar a muchas empresas en Galicia y en el Norte de España. Vamos a liderar el mercado de empresas a nivel estatal para el Grupo MASMOVIL en el que nos hemos integrado recientemente. Y gracias a ello somos, ya, también, operador de móvil con red propia y una red de fibra que cubre 26 millones de inmuebles en todo el país”.

Fernández de la Calle se refirió, además, al 5G, como otro de los grandes hitos conseguidos y detalló que “R ya cubre actualmente el 50% de Galicia con esta tecnología y el objetivo es alcanzar el 70% a cierre de año”.

Por su parte Eduardo Aldao, director de Innovación de Abanca, explicó que la entidad bancaria consiguió, durante la pandemia “responder y mantener la continuidad del negocio gracias, entre otras cosas, a las alianzas con proveedores y empresas y al trabajo previo de digitalización que ya teníamos avanzados antes de la crisis”. Aldao puntualizó que en la fase actual es necesario seguir trabajando bajo las premisas de la “agilidad y la apuesta por procesos digitales y de IA a todos los niveles junto a dosis de resiliencia y capacidad de adaptarnos con flexibilidad a los cambios”.

Acerca del rastro digital y la trascendencia del dato como activo clave en las empresas dentro de sus estrategias de digitalización y transformación, Juan Redondo, responsable de Transformación Digital de Parfois, aseguró que es esencial la alianza con proveedores de confianza: “En nuestro caso hemos iniciado ese camino con R y nos hemos encontrado con un proveedor que nos está acompañando en nuestro proceso para crear una experiencia de usuario que aporte valor. La gestión del dato exige un esfuerzo y exige tiempo. Y queremos transmitir a todas las áreas de la empresa, de manera transversal, esta manera de tomar decisiones con el dato como activo clave y las ventajas que la Inteligencia Artificial nos ofrece. Pero la IA ha de ir siempre unida a una estrategia de compañía”.

El director del Área de Competitividad del Igape, Norberto Penedo, aseguró que la respuesta de las empresas a la revolución 4.0 “ha sido muy buena desde siempre y el Igape ha intentado acompañarlas con ayudas para que muchas de ellas empiecen a caminar. Con la crisis, según explicó Penedo, la entidad ha seguido en esta línea, con inversiones y apoyos para superar el momento. La respuesta, dijo, “aún es algo reducida, sobre todo en el caso de las empresas pequeñas, pero los nuevos fondos pueden cambiar muchas cosas y van a exigir talento porque con inteligencia artificial pero sin inteligencia humana no vamos a ninguna parte”.

Sobre la sostenibilidad de las empresas en el entorno actual, Beatriz Mato, directora de Desarrollo Corporativo y Sostenibilidad de Greenalia, habló de la concienciación imprescindible en el desarrollo de empresas sostenibles; entre otras cosas, incorporando las energías renovables a sus procesos. Beatriz Mato aseguró que “estamos ante una necesaria, incluso obligada modernización que nos lleva a una nueva revolución industrial, con más tecnología, más Innovación, más digitalización, más energía verde y más economía circular”. Mato realizó un balance positivo del comportamiento de muchos sectores y de la sociedad en general durante la pandemia y relató que Greenalia también ha sabido reaccionar en los momentos más críticos y ahora sigue trabajando en temas tan acuciantes como la reducción de los gases efecto invernadero. “Es imprescindible hacerlo, con los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) como referentes, porque la sostenibilidad nos afecta a todos/as y a todo lo que hacemos. La industria ha de aliarse con los proveedores de energía sostenible para avanzar”.

Experiencias transformadoras: los casos de Vegalsa y CLUN

La Xornada se cerró con la intervención de los portavoces de Vegalsa y CLUN (Cooperativas Lácteas Unidas), quienes explicaron sus respectivos casos de éxito en sus procesos de digitalización empresarial. Alberto Iglesias, responsable ‘pricing’ de Vegalsa-Eroski explicó que la empresa de distribución alimentaria se encuentra “en proceso de transformación digital, convirtiendo todo nuestro entorno empresarial en datos susceptibles de ser analizados y explotados. Los datos se han convertido en el nuevo petróleo, son ya uno de los activos más importantes en la economía mundial. Por ello, nos estamos transformando en una organización ‘data driven’, donde las decisiones estratégicas se basan en el análisis de los datos para satisfacer mejor a nuestros clientes”.

Javier Cabana, director de TI de CLUN, incidió en que, desde su formación como cooperativa agroalimentaria, supieron que la palanca para optimizar la eficiencia de la cadena de valor del negocio (desde la producción a la distribución) sería, sin duda, la digitalización. Por eso han apostado por “una infraestructura de redes y datos que den respuesta a las necesidades de negocio, una arquitectura de software escalable en el tiempo e incluso por facilitar herramientas de decisión a los socios”.