Vinos y quesos, productos más afectados en nuestra Comunidad
La Xunta rechaza la implantación de aranceles al sector agroalimentario por parte de EEUU
Así lo trasladó este lunes el conselleiro de Medio Rural, José González, en Madrid, donde está participando en las reuniones del Consejo Consultivo de Política Agrícola para Asuntos Comunitarios y de la Conferencia Sectorial de Agricultura y Desarrollo Rural. El Consejo Consultivo analizó la situación provocada por la decisión de Estados Unidos de imponer aranceles a determinadas producciones agroalimentarias de la Unión Europea.
En este sentido, el conselleiro señaló que es importante “trasladar una postura unívoca por parte del Estado español, que debe canalizarse a través del Ministerio de Agricultura” y también que existe una coincidencia generalizada sobre que “no deberían recaer sobre el sector agroalimentario estos aranceles cuando el posible conflicto comercial no lo tiene a él como causa”. Además, José González advirtió que en el caso de Galicia la principal afectación que podrían tener estos aranceles recaería sobre los vinos y los quesos, por lo que pidió un esfuerzo especial, también por parte de la Unión Europea, para que se defiendan estos sectores agroganaderos.
En todo caso, José González se mostró también convencido de que la calidad, la diferenciación y la singularidad de los productos gallegos permitirán imponerse sobre una eventual subida de precios causada por ese incremento arancelario.
Postura del Ministerio
Según ha explicado el ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación en funciones, Luis Planas, al finalizar la reunión del Consejo Consultivo de Política Agrícola para Asuntos Comunitario, en la reunión se ha constatado la unidad de puntos de vista entre el Gobierno y las comunidades autónomas. “Todos estamos unidos en la firmeza de la negociación que debe seguir la Unión Europea con Estados Unidos para que el sector agroalimentario se quede fuera de esta disputa y no se vea afectado por las posibles sanciones comerciales, ya que no es el objeto de la discusión”.
Además, el ministro ha incidido en la importancia de estos aranceles para determinados productos, tanto desde el punto de vista cuantitativo como cualitativo, en especial para el aceite de oliva, la aceituna de mesa y el vino, pero también para el porcino, cítricos, queso o conservas.
Planas ha anunciado que este martes se reunirá con representantes del sector agroalimentario y el próximo miércoles viajará a Bruselas para transmitir al comisario europeo de Agricultura, Phil Hogan, y a la comisaria europea de Comercio, Cecilia Malström la posición del Gobierno de España y pedirle a la Comisión Europea firmeza en la negociación, ante unas sanciones que el ministro ha calificado de “inaceptables”.
En el caso de que finalmente no prosperaran las negociaciones y fueran impuestas las sanciones comerciales, el ministro trasladará al comisario Hogan tres peticiones concretas: el almacenamiento privado del aceite de oliva, ya que se dan las circunstancias excepcionales en base al reglamento comunitario; compensaciones a los productores que resulten afectados por las graves perturbaciones del mercado que van a suponer los aranceles; y medidas de promoción, con financiación comunitaria y nacional, para buscar mercados alternativos.
Plan estratégico de la PAC
En el Consello Consultivo también se avanzó en el diseño de la futura PAC y más concretamente en la elaboración del Plan estratégico nacional que corresponde por cada Estado miembro. En relación con estos trabajos, nuestra comunidad aboga por un tope máximo de ayuda por explotación que no supere los 60.000 euros, para favorecer a las de menor dimensión, que son las propias de Galicia. Se apuesta también por una ayuda redistributiva, de forma que el importe de las primeras hectáreas sea superior al del resto, para garantizar ese apoyo a las pequeñas y medianas explotaciones.
Para fomentar el relevo generacional en el campo, nuestra Comunidad defiende el apoyo a la incorporación de jóvenes a la actividad agraria y especialmente porque se apoyen las sociedades entre ellos, de una manera menos restrictiva que la actual.
Además, Galicia considera que la PAC tiene que incluir una discriminación positiva para las zonas de montaña y con limitaciones naturales, así como para las pequeñas explotaciones