Este lunes tuvo lugar una reunión sobre los programas de empleo de la Estrategia Galicia Retorna 2023-26 entre la conselleira de Promoción do Emprego e Igualdade, María Jesús Lorenzana, y el secretario xeral de Emigración, Antonio Rodríguez Miranda.

El documento, que duplica las medidas y el presupuesto de la Estrategia anterior, incide a través de un ciento de propuestas en cuatro áreas: laboral, educativa, social y de asesoramiento, seguimiento, coordinación y control. El ámbito del empleo es el que aglutina una mayor cantidad de medidas (37) que se centrarán en el impulso del emprendimiento, la formación y el empleo de los gallegos del exterior. A ello se destinarán 175 millones de euros hasta 2026, según las estimaciones del Gobierno gallego.

De este modo, en el área laboral se incluirán programas de incentivos a la contratación en la empresa destinados a facilitar la inserción laboral de las personas desempleadas con dificultades particulares para permanecer en el mercado de trabajo, favoreciendo el empleo estable y facilitando el incremento de las oportunidades laborales; acciones formativas para la adquisición de competencias y capacidades; y una actuación para impulsar la creación de empresas con una fase de pre-aceleración de acompañamiento y tutorización de los proyectos y una de aceleración para los planes de negocio más viables.  

La Estrategia Galicia Retorna 2023-26, que se aprobó la semana pasada en el Consello da Xunta, da continuidad al primer Plan integral de fomento y apoyo al retorno que se aprobó y puso en marcha en España: la Estrategia Retorna 2020, aprobada en 2018 y que mantuvo su vigencia hasta este año. La nueva planificación parte de la idea del retorno no solo como un derecho, sino como una ventaja competitiva para incorporar a la sociedad gallega personas de distintos países con su formación y experiencia profesional y también como una oportunidad para superar el complejo reto demográfico que tiene por delante nuestra comunidad. El objetivo de esta nueva estrategia es incrementar en un 35% el actual flujo de retorno de gallegos emigrados, hasta las 7.500 personas cada año.