Francisco Conde responde a una interpelación del BNG sobre el sector eólico en el Parlamento
La Xunta autoriza la construcción de 75 proyectos eólicos
Francisco Conde defendió que la Xunta aboga por aprovechar la oportunidad de la transición energética para promover un desarrollo eólico que genere efectos positivos en términos económicos, de empleo, de emisiones y de reducción de la dependencia energética y que, a la vez, sea compatible con el medio natural, la protección del patrimonio cultural y con la actividad del sector primario. En definitiva, una planificación ordenada, que aporte seguridad jurídica y que se realice desde una tramitación rigurosa, declaró el vicepresidente primero.
En este sentido, Conde informó de que la Xunta acaba de conceder la autorización administrativa previa y de construcción de 75 proyectos eólicos que suman 1958 MW, con el que Galicia se convierte en la primera Comunidad autónoma que lo logra para los proyectos vinculados al hito de 25 de enero.
En concreto, tras evaluar al por menor los proyectos que obtuvieron Declaración de Impacto Ambiental positiva, se denegó la autorización de un parque y en 24 se obligó a los promotores a reducir la potencia con respecto al proyecto inicial para que se ajustaran a los requerimientos técnicos, medioambientales y patrimoniales necesarios. Toda vez que 43 parques eólicos obtuvieron DIA negativa en enero, de los 119 parques para los que ya se completó la tramitación, siguen adelante el 63% de proyectos eólicos.
La Administración autonómica está exigiendo una evaluación ambiental común, a más rigurosa para conseguir una DIA, con participación pública y que tiene en cuenta el estudio de sinergias para evaluar los parques más próximos y las infraestructuras de evacuación.
Tramitación nueva ley
El conselleiro de Economía, Industria e Innovación señaló asimismo en su interpelación parlamentaria el impulso de la Ley de promoción de los beneficios sociales y económicos de los proyectos que utilizan los recursos naturales de Galicia.
Se trata de un marco normativo pionero que, entre otras medidas, pretende que las declaraciones de impacto ambiental evalúen los efectos sociales y económicos de los proyectos. Esto permitirá determinar en que iniciativas tendrá la oportunidad de estar presente la sociedad mixta que se prevé crear con otros agentes públicos y privados.
La clave es que parte de los beneficios por el aprovechamiento de los recursos naturales tengan un impacto directo positivo en la sociedad gallega, especialmente en las zonas más implicadas en este proceso de transición energética. Además, se estudiará la fórmula para crear un canon que grabe las líneas de evacuación de la eólica marina cuando toquen tierra, cuya recaudación se dedicará a las mismas finalidades medioambientales que el gravamen a la eólica terrestre.