La colaboración se circunscribe a la vía civil
Unións Agrarias y Eskariam colaborarán en la demanda de 7.000 ganaderos frente al cártel lácteo
La colaboración entre Unións Agrarias y Eskariam está enfocada exclusivamente en la vía civil y permitirá fortalecer las reclamaciones de los 7.000 ganaderos demandantes que aglutinan ambas organizaciones, ya que gracias a las sinergias se podrán reforzar las periciales de determinación del daño, y mejorar su identificación y cuantificación.
En cuanto a la vía administrativa, no compartirán ninguna información ni estrategia, cada firma representará a su cartera de afectados de forma independiente y como consideren más conveniente, 2.000 en el caso de Eskariam y 5.000 en el caso de Unións Agrarias, y defenderá la legalidad de la resolución de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC).
Por tanto, la alianza añadirá un intangible de gran valor en este tipo de reclamaciones, la “fuerza del colectivo”, ofreciendo a sus clientes una posición más sólida frente a las industrias lácteas partícipes en el cártel de la leche. Según la información disponible, se estima que el total reclamado por los clientes de Eskariam y Unións Agrarias a la industria superará los 1.500 millones de euros, lo que será una de las mayores reclamaciones del mercado nacional. Sendas organizaciones recuerdan que, de conformidad con la resolución de la CNMC, el resultado de la actuación del cártel de la leche desde el año 2000 al 2013, fue la ruina económica de la mayor parte de las explotaciones ganaderas de España, pasando de 56.379 en el año 2000 a menos de 20.000 en 2014.
David Fernández, fundador y CEO de Eskariam explica que “estamos orgullosos de poder colaborar con Unións Agrarias en la defensa de los afectados por el cártel lácteo y de representar ‘la fuerza del colectivo’. Esto, sin duda, repercutirá en una mejor defensa para los más de 7.000 perjudicados por estas prácticas abusivas y nos permite abordar la reclamación con más fuerza que nunca”. El secretario general de Unións Agrarias, Roberto García, manifiesta “tenemos una sensación agridulce ante el escenario judicial que se avecina ya que por un lado supone un triunfo para la base de productores de este país, que la Justicia actúe contra las prácticas impresentables e irresponsables de la gran mayoría de las industrias lácteas. Pero esta situación también deja en evidencia la negligente falta de control y exigencia, - cuando no compadreo- que las administraciones mostraron hacia las prácticas monopolísticas y mafiosas con las que las empresas de recogida y transformación de leche se condujeron a lo largo de muchos años”.