Terminales Marítimos de Galicia (TMGA) cuenta en la actualidad con dos concesiones en el Puerto Exterior, que suman 30.000 metros cuadrados, para el movimiento de graneles sólidos y mercancía general. Habida cuenta de la creciente actividad que lleva a cabo en el nuevo puerto, ha solicitado un incremento de 12.884 metros cuadrados en su instalación principal, en la que construirá dos nuevas naves, así como un vial auxiliar, con lo que pasará a disponer de cerca de 43.000 metros cuadrados de superficie.

La iniciativa de TMGA viene a corroborar la apuesta que están realizando los operadores portuarios por consolidar y aumentar su presencia en Langosteira. En este sentido, el BOE también publicó el pasado viernes 17  de enero el anuncio por el que se somete a información pública la solicitud presentada por Oleosilos de Galicia para ampliar la superficie destinada a su terminal de graneles líquidos, que de esta forma duplicará su capacidad de almacenamiento, pasando de los 6.860 metros cúbicos que había previsto inicialmente a 13.860 metros cúbicos, lo que le permitirá incorporar una línea de importación de aceites.

13 concesiones en Punta Langosteira

El Puerto Exterior cuenta con 13 concesiones de empresas privadas, que han concitado inversiones ejecutadas o comprometidas por un importe superior a 220 millones de euros. Con las ampliaciones solicitadas por TMGA y Oleosilos, el total de la superficie concesionada y solicitada por los operadores, incluyendo terrenos y lámina de agua, asciende ya a 293.000 metros cuadrados, mientras que las operaciones de carga y descarga realizadas desde su puesta en servicio en 2012 comprenden más de 910 buques y más de 9,6 millones de toneladas de mercancías de diferente naturaleza.

Con el objetivo de atender a la demanda de los operadores, la Autoridad Portuaria está habilitando un nuevo muelle de 350 metros que entrará en servicio este año, con lo que se conformará una línea de atraque continua de 1.500 metros lineales. Además, Repsol tiene muy avanzado el pantalán que albergará las descargas de petróleo, que se trasladarán a Langosteira desde su actual ubicación en San Diego.