“Pese a las dificultades que la pandemia de covid-19 ha generado en este 2020, desde Suelo Empresarial del Atlántico (SEA) hemos mantenido una intensa gestión que ha permitido cerrar el año con una importante movilización de suelo industrial, con proyectos tanto de pequeñas como de grandes empresas que supondrán la creación de centenares de puestos de empleo y que impulsarán polígonos, como Rianxo o Vilanova de Arousa, que estaban prácticamente paralizados”, ha resumido la gerente de SEA, Beatriz Sestayo.

En concreto, en el año 2020 se ha cerrado una importante operación en Rianxo con la empresa Conservas Cerqueira, titular también de la firma Pay Pay, que ha adquirido cinco parcelas por un total de 1.568.448 euros más IVA.   También en Rianxo ha adquirido suelo la empresa Mar da Pobra, que impulsará un proyecto de conservas sostenibles. Ha adquirido 1.152 m2 por un importe de 80.640 euros.

Ha destacado también el impulso al polígono de Vilanova de Arousa, en el que se instalará la empresa pública Sogama en un total de 7 parcelas cuyo importe asciende a 1.545.332 euros y que suman cerca de 20.000 metros cuadrados. El impulso definitivo al polígono de Vilanova, tras años sin avances, llegará también de la mano de otra empresa conservera, Vinova Group, que se ha hecho con otras cinco parcelas que alcanzan los 19.229 metros cuadrados.

En este caso, esta operación implica también la confirmación del interés empresarial en una de las modalidades que está impulsando la actual gerente, Beatriz Sestayo, para favorecer la instalación empresarial, como es el derecho de superficie. Se trata de un sistema próximo al alquiler con opción a compra pero con mayores ventajas y que permite a las empresas comenzar su instalación en un polígono sin tener que comprar las parcelas de forma inmediata.

Esta modalidad también ha dado sus frutos en 2020 en Muros, con la adjudicación de 977 metros cuadrados a Trimar Cerramientos.

El 2020 ha sido, además, el año en el que se han intensificado las gestiones para seguir centralizando el sector logístico en el polígono de Rábade, en el que se han vendido cerca de 6.000 metros cuadrados a dos empresas de transportes, que ahora podrán operar en esta área industrial.

El pasado año también se incrementaron las gestiones con distintos concellos para valorar posibles actuaciones futuras. Beatriz Sestayo ha destacado “que la administración pública tiene que ejercer como motor económico y con este objetivo se prevé el impulso a la creación de nuevas áreas empresariales en aquellos lugares en los que se detecte demanda empresarial, oportunidad de negocio, ubicación y predisposición municipal”.