Los sindicatos habían anunciado una huelga indefinida a partir del 5 de octubre
La reunión sobre el convenio del siderometal de Ourense finaliza sin acuerdo
La reunión de negociación del convenio colectivo de siderometal en Ourense que patronal y representantes sindicales mantenían este martes a la tarde en la sede de la CEO finalizó sin acuerdo, por lo que se mantiene la huelga indefinida anunciad a a partir de este miércoles por las centrales sindicales.
En la reunión estuvieron presentes, por la parte empresarial, representantes de las asociaciones de Instalectro, Acauto, Atave e Industria del Metal, así como los sindicatos UGT, CIG y CCOO por la parte social.
Según informaron desde la representación empresarial, la patronal del siderometal acudió a la reunión con una propuesta sobre la mesa consistente en un incremento de un 5% en 2022 a abonar desde el mes de julio, un 4% en 2023, y un 4% en 2024 que las centrales sindicales rechazaron por entender insuficiente. Los sindicatos reclamaban una revalorización salarial que garantizase el poder adquisitivo de los trabajadores frente a la inflación.
La parte empresarial confiaba en que fuera posible firmar el convenio, al formular una oferta superior a lo firmado por CCOO y UGT para los funcionarios, en cuyo caso será un 9,5% de incremento en tres años que en función del IPC puede llegar al 11%, cuando la patronal ourensana ha ofrecido un 13% en la reunión de este martes. La parte social alegó que la oferta formulada en mayo era mejor, abonando un 4% desde enero, lo cual resulta llamativo porque a esa propuesta siguieron tres meses de silencio por su parte, señalan desde la parte empresarial.
Según valoran las patronales, las peticiones formuladas por las tres centrales sindicales en el convenio de Ourense están muy por encima de la media que se está firmando en este y en otros sectores en toda España.
La parte empresarial lamenta que no haya sido posible el acuerdo y esto implique el inicio de una huelga con carácter indefinido. Asimismo, manifiesta su profunda preocupación por los actos vandálicos y agresiones sufridos por algunos trabajadores que han querido trabajar ejerciendo un derecho tan legitimo como el de la huelga.