La presidenta de la SEPI, Pilar Platero, ha trasladado al presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, las novedades que los Presupuestos Generales del Estado de 2018, aún pendientes de tramitación parlamentaria, aportan a los planes de Navantia en Galicia, así como información detallada sobre el Plan Estratégico que SEPI ultima para la compañía. 

El encuentro ha obedecido al interés de ambos en abordar el importante impacto que los Presupuestos estatales, en caso de aprobarse en el Parlamento, tendrán sobre Navantia y, en concreto, sobre Ferrol. El contrato que facilitará más estabilidad a estos astilleros será el de las fragatas F-110 y está pendiente de firmar con el Ministerio de Defensa. Para este programa ya constan 250 millones de euros consignados como anticipo financiero en los Presupuestos del Ministerio de Economía, Industria y Competitividad.

El volumen del contrato para la construcción de estas cinco fragatas alcanzará un importe aproximado de 4.000 millones de euros y generará diez años de trabajo para la factoría de Ferrol, donde mantendrá alrededor de 7.000 empleos anuales directos e indirectos.

En la actualidad, los astilleros de la Ría de Ferrol representan el 23% del empleo industrial en A Coruña. Además del programa de las fragatas, reforzarán sus niveles de ocupación con la finalización del sexto Buque de Acción Marítima (BAM). A ello se suma el programa en curso de los buques logísticos para Australia, la ingeniería del buque de asalto anfibio para la Marina turca y la colaboración en el programa de fragatas para la Marina australiana, además de la actividad en el área de energía eólica y de reparaciones de gaseros.
  
Plan Estratégico para Navantia

Pilar Platero también ha compartido con el presidente de la Xunta las últimas novedades sobre el Plan Estratégico de Navantia que en estos momentos se negocia con los sindicatos, cuyos ejes básicos marcarán el futuro de la compañía.

Uno de estos ejes descansa en el plan comercial de operaciones, cuyo objetivo es mantener la carga de trabajo en todos los centros. A ello ayudarán el nuevo ciclo inversor del Ministerio de Defensa, en el que se enmarca el contrato de las fragatas F-110, y los avances en la internacionalización de la empresa. Otro eje se centra en la eficiencia operativa y se orienta a modernizar los centros con la incorporación de nuevas tecnologías, el desarrollo de la digitalización y la aplicación de los principios del Astillero 4.0. Por último, Navantia promoverá un rejuvenecimiento de la plantilla, vinculado a un ambicioso plan de formación pensado para la mayor parte de los empleados.

Los aspectos generales del Plan Estratégico, que prevé una cartera de pedidos de 11.000 millones hasta 2022, ya han sido abordados por SEPI y la dirección de Navantia con los sindicatos en tres reuniones celebradas en Madrid.