Todos reclaman medidas para frenar el impacto de la huelga
El paro del transporte ya afecta al sector primario, la industria conservera y el comercio
Lo constata Anfaco-Cecopesca, cuyas empresas asociadas "han visto como los camiones no podían acceder a sus instalaciones por piquetes coercitivos o directamente ni acudían generándose, además, una corriente de mensajes en redes que derivaron en un seguimiento incremental hasta hoy (por el jueves 17".
Según exponen desde la patronal conservera," las fábricas están viendo frenada la recepción de materia prima de los puertos o proveedores, dificultades para servir a clientes e incluso imposibilidad para enviar los subproductos a sus gestores, por lo cual algunas empresas ya han tomado la decisión de paralizar las producciones, cerrar las fábricas y, lamentablemente, esta decisión será seguida en próximas horas por nuevas factorías". Esta situación, explican desde Anfaco, supone "un nuevo golpe a la sostenibilidad y competitividad del complejo mar-industria, que con dificultad programa su futuro ante una energía desbocada, un aceite de girasol sin su principal proveedor, Ucrania, o unas materias primas ausentes ante los paros convocados por cierta flota española ante el coste del fuel".
Anfaco solicita al Gobierno "una intervención inmediata y urgente con el fin de frenar el impacto de este paro de transportes que se notará en los lineales españoles y que necesitará de semanas para restaurar la situación logística precedente".
También el comercio de proximidad está ya sufriendo las consecuencias de la huelga de transportes por carretera al no poder recibir mercancía, lo que está afectando a sus ventas, exponen desde la Federación Gallega de Comercio. Este colectivo se suma a la solicitud de medidas urgentes para garantizar el normal funcionamiento de las empresas, en este caso comerciales, "ya que esta situación no hace más que agravar la difícil situación del sector2.
Exponen desde la Federación que, tras dos años complicados por la pandemia, "ahora el comerciante tiene que afrontar el brutal incremento de costes fijos (electricidad, calefacción, etc.) y por encima, la falta de productos, repuestos, etc. para poder realizar con normalidad su actividad, satisfacer la demanda de sus clientes o responder a los compromisos adquiridos con los mismos". "Si la situación se alarga, las consecuencias pueden ser nefastas para muchos empresarios del comercio gallego, por lo que se espera que se busque una solución lo más rápida y satisfactoria para todas las partes en el menor plazo de tiempo posible", concluye su comunicado.
Sector primario
Los efectos de la huelga de transporte se sienten también en el sector agroganadero. La cooperativa CLUN, la más importante de Galicia, afronta esta situación contingente "centrando sus esfuerzos en garantizar el suministro de los insumos necesarios a sus socios y socias, así como en asegurar el abastecimiento de materia prima en sus centros de producción".
“Debemos evitar que la situación derive en efectos irreparables sobre el bienestar animal, por lo cual estamos haciendo todo lo posible para procurar el abastecimiento del alimento para el ganado”, afirma Juan Gallastegui, director general de CLUN.
“El sector agroganadero, al igual que otros sectores, está soportando muchas presiones en estos últimos tiempos. Los ganaderos y sus familias no pueden ser el daño colateral”, asegura.
Asimismo, Gallastegui recuerda que “la leche es un alimento altamente perecedero y esencial para el consumo diario”, y pone el acento en que “los márgenes de tiempo que se manejan en este sector son estrechos”.
La cooperativa espera poder continuar con la actividad transformadora para así contribuir a garantizar el abastecimiento de los lineales de los supermercados con sus productos lácteos.
Embotelladores de aguas
También otros sectores, como el de plantas envasadoras de agua, han manifestado en las últimas horas la "gravidade" de la situación que está provocando el paro de los transportistas. "Desde as empresas do sector, comunicáronse as diferentes incidencias ante a ausencia duns servizos mínimos que garantan que se vaia dando saída a parte da mercadoría que se atopa almacenada nas diferentes plantas envasadoras"; detallan desde la A Asociación Gallega de Empresas de Envasado de Auga Mineral Natural (AGAMIN).
Según relatan, la huelga está poniendo en una situación "moi complicada" a la industria envasadora, "que podería parar a produción ante a imposibilidade de dar saída aos produtos. Isto leva, á súa vez, que se estean a producir os primeiros problemas de abastecemento nos mercados". AGAMIN avanza la posibilidad de que algunas empresas tengan que solicitar ERTEs si han de parar su producción por culpa de la huelga.
El gerente de la asociación, Benigno Amor, solicita que "desde a Delegación do Goberno en Galicia, trasladen a nosa preocupación aos Ministerios de Agricultura, Interior e Transportes para que traten de alcanzar unha solución urxente cos convocantes desta folga, para evitar desabastecementos dos mercados e que nos vexamos obrigados a paralizar a actividade da nosa industria”.
AGAMIN representa a seis empresas embotelladoras de auga mineral en Galicia, que dan empleo a 250 personas y generan otros 300 puestos indirectos.
Dispositivo de las fuerzas de seguridad
A este respecto, el delegado del Gobierno en Galicia, José Miñones, trasladó a las empresas gallegas que la Delegación del Gobierno trabaja para garantizar el derecho de aquellos que opten por trabajar durante las jornadas que dure el paro convocado por una parte minoritaria del sector del transporte por carretera.
Miñones afirmó que la Delegación del Gobierno coordina desde el pasado lunes un dispositivo que moviliza a 2.000 agentes de Policía Nacional y de Guardia Civil en las cuatro provincias con el objetivo de garantizar el derecho al trabajo y a la actividad.
En concreto, se reforzó la presencia en zonas como los puertos, los accesos a los polígonos industriales o las vías de comunicación principales.