El secretario general de Industria, Raül Blanco, ha afirmado que el cierre de la planta de aluminio primario de Alcoa San Cibrao y el despido de 524 trabajadores aboca a "un conflicto cruel e innecesario a los trabajadores a sus familias y a la comarca de A Mariña". Añade Blanco que se trata de una decisión "absolutamente innecesaria" por cuanto en las últimas semanas desde el Gobierno se había demostrado que había soluciones viables para la fábrica.

A este respecto, el el Ministerio de Industria, Comercio y Turismo ha emitido un comunicado en el que responsabiliza a Alcoa del fracaso de las negociaciones de venta de la planta de San Cibrao. Industria reitera su malestar por el hecho de que Alcoa abandonara la negociación no respondiendo a la propuesta del Gobierno de que sea la SEPI la que actuara de intermediaria para la venta de la planta a Liberty House.

Para el secretario general de Industria la decisión de la multinacional norteamericana "atenta contra la economía de mercado" y tiene como único objetivo "restringir la competencia en su sector".  

En el comunicado del Ministerio se muestra el apoyo a los trabajadores afectados, sus familias y la comarca de A Mariña por parte del Gobierno “que seguirá trabajando para lograr una solución que mantenga el empleo y las capacidades industriales en Lugo”. En este sentido, el secretario general de Industria asegura que "las administraciones actuarán con toda la contundencia en el ámbito laboral, ambiental y en todos aquellos que sea necesario".