Tal y como ya había hecho hace un mes, la CIG decidió promover la huelga ante la falta de avances en la negociación del convenio y la postura de la patronal, que desde el punto de vista del sindicato, se empeña en recortarle al personal derechos que ya tiene consolidados.

La huelga será de 24 horas y afectará a todos los centros de trabajo de Galicia que se rigen por el convenio colectivo estatal de centros de llamadas. Coincidiendo con la jornada, la CIG desarrollará concentraciones delante de Bosch en Vigo a las 11:30 horas y de Atento, en A Coruña, a las 11:00 horas.

Desde la central sindical denuncian que la oferta de subida salarial del empresariado contempla un 0% para 2020, un 0,8% para 2021, un 2,5% para 2022 e IPC+0,5% (con el tope del 2,5%) para 2023. Además, la patronal quiere seguir manteniendo la contratación a tiempo parcial (con contratos de hasta 15 horas, pero ampliándolos cuando a las empresas les convenga).

Al mismo tiempo, pretende aprovechar la "miserenta" reforma laboral para ampliar los plazos de los contratos temporales " e seguir manténdonos na absoluta precariedade, en vez de acatar a sentenza da Audiencia Nacional e facer indefinido a todo o persoal".

Otra de las aspiraciones de las compañías, segun el sindicato, pasan por reducir los complementos de IT y las horas médicas, flexibilizar la jornada máxima anual "segundo lles pareza", eliminar el máximo de 39 horas semanales o que la excedencia especial sólo pueda cogerse fuera del verano o del período de Navidad.

Por eso en la CIG consideran que " isto non é unha negociación, é un roubo a cara descuberta que nos condena ao empobrecemento e á escravitude", por lo que llaman el personal a luchar por un convenio justo y digno para los centros de llamadas. " Non queremos que se volva asinar un convenio que recorte dereitos e manteña a precariedade", señalan desde la central sindical.