Encuentro online con el vicepresidente del Banco Central Europeo
De Guindos advierte de una recuperación “incierta, incompleta y desigual”
El vicepresidente del Banco Central Europeo, Luis de Guindos, ha sido el invitado de un encuentro online organizado por la Confederación de Empresarios de Pontevedra (CEP) y la Universidad de Vigo.
En una conexión por videoconferencia, Luis de Guindos, expuso la proyección de crecimiento en la UE para el tercer trimestre, que el Banco Central Europeo fija en el 8% en tasa trimestral, aunque reconoció que desde agosto se ha notado una desaceleración en la zona euro. En este sentido, de Guindos advirtió de que la recuperación económica es “incierta, incompleta y desigual”. Incierta porque “los brotes están ahí” y porque hay una enorme incertidumbre para el devenir económico; incompleta, porque “hasta final de 2022 no se alcanzarán los niveles de renta de antes de la crisis”; y desigual, porque las consecuencias de la crisis son “asimétricas”, tanto por sectores como por países.
En este contexto, el economista defendió las medidas tomadas hasta el momento por el Banco Central Europeo, que han ido en tres líneas: la inyección de liquidez en condiciones muy favorables para los bancos, el programa específico temporal y de emergencia que va a comprar hasta mediados del año próximo 1,35 billones de activos, principalmente deuda pública; y los alivios de capital a los bancos para mantener el flujo crediticio. Porque, la prioridad, es ser “capaces de mantener a las empresas vivas, y que una vez que la pandemia pase puedan continuar su actividad”, afirmó de Guindos.
La dificultad está, aseguró el vicepresidente del BCE, en acertar con “el ritmo de retirada de esos incentivos, fundamentalmente fiscales”, por lo que es “absolutamente importante acompasar esta retirada a la evolución económica”. “Una retirada precipitada podría llevar a una segunda recaída de la actividad económica”, advirtió.
A favor de las fusiones bancarias
El vicepresidente del BCE puso en valor el papel del fondo de recuperación aprobado por la UE, que ha conseguido que la crisis no se transforme en “una crisis de deuda” y que “ha evitado un endurecimiento de las condiciones de financiación de empresas y familias”.
No obstante, de Guindos apuntó a ciertos riesgos: el primero, la acumulación de deuda, tanto pública como privada; el segundo, la baja rentabilidad el sistema bancario europeo. En este sentido, el economista se mostró a favor de que prosigan los procesos de fusión y adquisición entre entidades bancarias, que entiende, “no son una finalidad en sí misma, sino instrumentos para intentar arreglar un problema de rentabilidad”.
En el turno de preguntas, moderado por Irene Garrido, profesora de la Universidad de Vigo y exsecretaria de Estado de Economía, el público que ha seguido este encuentro se ha interesado por la posible pérdida de competencia ante las consolidaciones bancarias. A este respecto, el vicepresidente del BCE descartó, por la entrada de nuevos jugadores (las fintech) en el negocio bancario de financiación tradicional.
De Guindos no quiso entrar a valorar, sin embargo, una posible subida de impuestos en España ni tampoco la decisión de eliminación del techo de gasto en los ayuntamientos. “No puedo entrar en consideraciones de política nacional”, afirmó.
Colaboración CEP - UVigo
El encuentro con el vicepresidente del BCE ha sido promovido conjuntamente por la Confederación de Empresarios de Pontevedra y la Universidad de Vigo, y ha sido seguido, tanto online como presencialmente, por estudiantes universitarios y representantes económicos y empresariales. Abrieron la jornada el rector de la Universidad de Vigo, Manuel Reigosa, y el decano de la Facultad de Económicas y Empresariales, Jorge Falagán.
También intervino el presidente de la CEP, Jorge Cebreiros, quien apuntó que la clave para salir de esta crisis “será el ritmo de reactivación de la actividad económica y del empleo”, pero que esta se enfrenta a un riesgo principal, que es de los rebrotes. En este contexto, Cebreiros fue crítico con una posible subida de impuestos -“sería contraproducente”, afirmó-y con las políticas del Gobierno que “no son demasiado esperanzadoras y con unos estímulos a la economía claramente deficitarios”.