En una reunión con el presidente del Parlamento gallego
El Foro pola Economía Social Galega aboga por priorizar el empleo inclusivo “ahora más que nunca”
En la reunión, que tuvo lugar en la sede del Parlamento gallego, se abordó la economía social desde diferentes prismas y con diferentes aplicaciones prácticas. Por un lado, el papel que puede jugar en el proceso de reflexión sobre el modelo de residencias, en el foco del debate actualmente a raíz de la pandemia. Por otro, su presencia en los fondos de recuperación a través de proyectos vinculados a la economía de los cuidados, la gestión forestal y la economía circular, “especialmente en el ámbito de la gestión de residuos, específicamente en el textil, donde tenemos gran experiencia”. A este respecto, el presidente de Foro destacó que “participar en esta actividad supondría un importante impacto en términos de empleo inclusivo, así como en el sentido de cumplir con la trasposición de la directiva europea en esta materia”.
Con este encuentro, el Foro pola Economía Social Galega, que engloba más de 4.700 organizaciones que emplean a 24.900 traballadores, continúa con el trabajo de representación encomendado por sus asociados, “intensificando de forma especial la presencia de la economía social en el Parlamento con la colaboración de su presidente y de los diferentes grupos parlamentarios”, comentó su presidente, Celso Gándara. Desde su creación en 2018, el Foro pola Economía Social Galega trabaja intensamente para el reconocimiento por parte de las instituciones de este sector como un agente económico más. Para ello, es primordial su participación en aquellos foros en los que se debate el futuro de Galicia, donde la economía social representa el 7% del PIB.
En este contexto, Gándara recordó que el próximo semestre Bruselas presentará su largamente demandado Plan de Acción para la Economía Social que recoge algunas de las propuestas realizadas por el Foro a través de sus entidades representativas. El objetivo de este plan, según señalaron desde la Comisión Europea, es “potenciar un modelo de éxito que actualmente cuenta con 2,8 millones de empresas de economía social que generan 13,6 millones de empleos y representan el 8% del PIB comunitario”.