“Seguimos consolidando la operatividad de un Gobierno estable, viable y previsible, que es lo que los gallegos quisieron”, indicó Feijóo. No obstante, la inestabilidad en el panorama político nacional impidió que las comunidades pudieran cumplir con los tiempos estipulados e hizo que, por primera vez, la Xunta no pudiera aprobar en plazo el techo de gasto.

El Gobierno autonómico en funciones fue adelantando trabajo, pues lleva semanas trabajando en un borrador de los Presupuestos y a principios de septiembre aprobó un techo de gasto provisional para el próximo año. El presidente recordó que en aquel Consello también se pidió un acuerdo de los grupos políticos del Congreso de los Diputados para dejar gobernar a las comunidades autónomas, un acuerdo que se concretó en la aprobación de una reforma de la Ley de estabilidad que permite que las comunidades conozcan ya el límite de déficit para 2016, que se situará en el 0,5%. De este modo, va a ser posible “que el Gobierno saliente le entregue al que va a tomar posesión unos Presupuestos prácticamente finalizados”, indicó Feijóo.

Indicadores macroeconómicos
Los Presupuestos seguirán la senda trazada en el Plan Estratégico hasta 2020, guía de la economía gallega, aunque podrá ser actualizado en función de las previsiones económicas. Este documento incluirá los siguientes indicadores macroeconómicos: el PIB, que se prevé que crezca un 2,3% en 2017, igual que la media nacional, y la tasa de paro, para la que se calcula una bajada interanual de casi dos puntos, que situaría a Galicia en el 15,6%, 2,2 puntos por debajo de la estimación para el conjunto de España.

Feijóo avanzó que le pedirá al Parlamento autonómico que tome como prioridad la tramitación de los Presupuestos de 2017.