Según el cálculo de la Cámara de Comercio, en esta cifra se tienen en cuenta las pernoctaciones en hoteles, los vuelos con salida o llegada a Alvedro, la utilización de taxis, autobuses…, los almuerzos y cenas que tuvieron lugar en restaurantes de A Coruña, la participación de agencias de viajes, empresas de organización de eventos, intérpretes, guías y las compras realizadas en pequeños comercios y centros comerciales por los asistentes que se quedaron algunos días más para visitar empresas y la propia ciudad. Este dato supone un incremento de un 9% en el impacto económico generado en la ciudad respecto a la edición celebrada el pasado año. Además, este evento produjo una impresión muy positiva en los participantes extranjeros, que pudieron conocer algunos de los principales activos turísticos de la ciudad.

Contactos y primeros acuerdos

En cuanto al balance empresarial de Exporpymes, también ha sido muy positivo ya que se ha calculado que las 200 empresas gallegas y el centenar importadores y distribuidores extranjeros participantes mantuvieron alrededor de 2.650 contactos de entrevista directa. Muchos de estos contactos dieron frutos ese mismo día con el cierre de negocios en firme y contratos de exportación o colaboración entre empresas. De hecho, al término del evento y al día siguiente, se desarrollaron un buen número de visitas posteriores para conocer empresas gallegas in situ por parte de los importadores extranjeros.

En lo que se refiere a los sectores participantes, el de alimentación y bebidas contó con una gran diversidad de productos presentados, algo que sorprendió gratamente a los importadores especializados en este ámbito. Así, se encontraron con productos tan innovadores como mermeladas de productos no tradicionales, conservas ecológicas, pulpo en tabla, aceite de oliva, tónica elaborada con agua de mar, caracoles, té cultivado en Galicia, etc. La primera compra de Exporpymes 2017 tuvo lugar, precisamente, en la muestra de alimentación a los 10 minutos de comenzar por parte de una empresa portuguesa.

En el sector de materiales de construcción, los dos países cuyas empresas importadoras fueron más receptivas fueron Polonia y Marruecos. De hecho, empresas polacas ya alcanzaron acuerdos con algunas compañías gallegas.

La novedad de este año fue el espacio expositivo dedicado a la confección infantil, donde las empresas gallegas tuvieron oportunidad de mostrar su buen hacer a importadores de México, Chile, Moldavia, Marruecos y Polonia. En este sentido, importadores mexicanos cerraron acuerdos con dos de las empresas presentes en esta exposición.