El secretario de Administración Local Alejandro de Diego Gómez y el profesor de la Universidad de Vigo Alberto Vaquero son los autores de este estudio, que parte de la base de la necesidad de poner al servicio de los ciudadanos unas  instituciones que sirvan con eficacia y eficiencia a las necesidades y exigencias que tienen en pleno siglo XXI.

“En él se plasma la realidad de la situación municipal gallega así como se realizan una serie de propuestas, que pueden ser perfectamente extrapolables al resto del Estado, y que creemos que no solamente podrían frenar esa despoblación del rural, sino que se revertiría la situación, mejorando notablemente el nivel de vida de los ciudadanos de los pequeños pueblos, a través de la constitución de ayuntamientos de mayor dimensión mediante un proceso programado, planificado y no traumático de fusiones”, explicaba a este medio de Diego Gómez.

El estudio recoge que los ayuntamientos gallegos se sitúan en el último lugar del ranking de ingresos, con una media de 824 euros por habitante, un 25,6% por debajo de la media estatal. Si comparamos la repercusión per cápita de los ingresos se constata que a menos habitantes son necesarios mayores recursos para prestar menos servicios.

Desde un punto de vista económico, por tanto, los investigadores entienden que el redimensionamiento de la planta local es absolutamente necesario, al comprobar que los municipios de menos de 1.000 habitantes suponen un mayor coste per cápita para sus vecinos así como una mayor dependencia de las transferencias corrientes provenientes de otras Administraciones territoriales. En la actualidad, el 64% de los concellos gallegos tienen menos de 5.000 habitantes (27 de ellos tienen menos de mil vecinos).

Cinco propuestas

La propuesta principal que se formula en el estudio es la fusión de ayuntamientos, para convertirlos en unas nuevas organizaciones que se sitúen, como mínimo, entre los 5.000 y los 7.000 habitantes. Los investigadores estiman que el número total de municipios en Galicia debería estar entre los 143 y los 172, es decir, debería producirse una reducción de entre el 45% y el 54%. Por provincias, la de Ourense será la más afectada, con un número resultante de Ayuntamientos de entre 33 y 39 (frente a los 92 actuales) y la que menos, la de A Coruña, con entre 50 y 59 (frente a los 93 actuales). Lugo quedaría entre 32 y 39 (frente a los 67 actuales) y la de Pontevedra, entre 28 y 35 (frente a los 61 actuales).

Una segunda propuesta que hace el informe de Red Localis es la creación de una oficina que se encargue del estudio, programación, promoción y propuesta de las fusiones que realmente necesita nuestra Comunidad. También reclaman el desarrollo de una estrategia de información sobre las fusiones municipales con la finalidad de erradicar los prejuicios sobre las mismas. Su propuesta pasaría también por la modificación de las Diputaciones Provinciales, cuyo pleno pasaría a estar formado por todos los alcaldes.

Y finalmente, Alejandro de Diego Gómez y Alberto Vaquero apuntan en su estudio que el debate sobre el redimensionamiento de la planta local debería incluir una reforma de la financiación municipal, evitando el anticipo de fondos por parte de los ayuntamientos y siendo necesario replantearse la equiparación de la hacienda local gallega con la del resto del Estado.