De esa cantidad, según especificó el titular de la Xunta, 125 millones provienen de fondos públicos y 75 millones de capital privado movilizado. Se trata de más del doble de financiación con el que contó el sector en el período 2012-2015, concretamente, un 117% más. Para este año 2016, la inversión pública-privada se sitúa en los 37 millones de euros.

Como indicó Feijóo, el camino hacia el reconocimiento internacional de nuestro sector biotecnológico pasa por tres objetivos fundamentales: crear 30 nuevas empresas biotecnológicas en Galicia en los próximos cinco años, un 15% más de las cerca de 220 que tenemos hoy; sumar, entre todas ellas, una facturación de 300 millones de euros, un 20% más que en la actualidad; y generar 300 nuevos empleos calificados en el sector, un 25% más de los actuales.

Además, añadió que el documento prioriza tres áreas: el aprovechamiento de los recursos en los que somos una potencia para la obtención de alimentos antienvejecimiento o la gestión sostenible de los recursos marítimos; hacer más competitiva la industria tradicional a través de la innovación, aplicándola al sector lácteo o a la gestión sanitaria de la industria animal; y valorizar el conocimiento en áreas de fortaleza competitiva, empleando las nuevas tecnologías para la medicina personalizada, la innovación abierta en el descubrimiento de fármacos y las tecnologías facilitadoras.

El máximo responsable autonómico recordó que Galicia ya es una de las comunidades más potentes de España en este sector, como así lo constata el hecho de que el 2,11% de las nuevas empresas que nacen en Galicia son biotecnológicas, el doble de la media española. Además, es la cuarta comunidad con más emprendimiento en el sector y representa el 5,1% del gasto público estatal en I+D+i biotecnológico.

66 agentes entre empresas, instituciones, organismos y centros de investigación y universidades han realizado aportaciones a esta Estrategia gallega de impulso a la biotecnología 2016-2020.