El proyecto RAMSSES tiene una duración de cuatro años y un presupuesto total de 13,5 millones de euros, de los cuales 10,8 son contribución de la Unión Europea, y en él participan 36 socios de 12 países.

En el marco de esta iniciativa, que tiene el objetivo de mejorar la capacidad de innovación de la industria marítima, se implementarán 13 demostradores a escala real diseñados para buscar soluciones innovadoras para las necesidades del mercado y con los que se validará, a nivel económico y técnico, la aplicación de estas medidas para el uso marítimo. Dichos demostradores fomentan el uso de nuevos materiales, como por ejemplo composites de matriz polimérica, aleaciones metálicas ligeras o sistemas multimaterial metal-composites, etc.; que mejoran el rendimiento del ciclo de vida de los buques y las estructuras marítimas, reducen su huella ambiental y contribuyen a que la industria sea más competitiva y, por consiguiente, fomentan y mantienen el empleo en el sector.

Estos materiales innovadores son más ligeros y ofrecen un mayor rendimiento que los que se emplean habitualmente, como el acero de grado naval. Es por ello que el proyecto busca probar la viabilidad del uso de dichos materiales en diversos casos, desde la fase de diseño y producción hasta su integración en el buque. Mediante las demostraciones se probará que es posible reducir de forma significativa el coste de mantenimiento de los barcos y mejorar el ciclo de vida de las estructuras marítimas en aproximadamente un 30% en comparación con los materiales y los procesos de fabricación tradicionales. Para demostrar estas estimaciones, se definirán indicadores clave de rendimiento (KPI), orientados a medir el rendimiento económico y el impacto ambiental a lo largo de todo el ciclo de vida de las estructuras.

Además, para fomentar la introducción de estos materiales en el sector, se pondrán en marcha un repositorio de conocimiento y procedimientos de mejores prácticas, que permitirá utilizar esta información para casos futuros similares; y, por lo tanto, contribuirá a una transferencia continua de tecnología en el sector marítimo.

Papel de los socios gallegos

AIMEN trabajará con Astilleros Cardama y Galventus Servicios Eólicos para desarrollar soluciones a partir de materiales compuestos para la reparación y refuerzo de áreas críticas en estructuras metálicas y no metálicas de embarcaciones. En el caso concreto con Astilleros Cardama, participará en la definición de los casos de estudio, en el diseño y en la fabricación de los demostradores y en la evaluación y validación de las soluciones desarrolladas, mientras que con Galventus, el Centro Tecnológico colaborará en el proceso de fabricación de las soluciones de reparación o refuerzo con composites y la caracterización para la preparación superficial y unión de los materiales compuestos a las estructuras que vayan a ser reparadas o reforzadas.