La Ley gallega del emprendimiento suprimió –con carácter general- la necesidad de licencia municipal de obra y actividad para el ejercicio de cualquier actividad económica, excepto de las que requieren un proyecto técnico de edificación. De este modo, para la puesta en marcha de una nueva actividad empresarial es suficiente con la comunicación previa al ayuntamiento, junto con la documentación que garantice, en caso de que sea preciso, el cumplimiento de los requisitos ambientales, de seguridad y salubridad.

En este contexto, las ECCOM, a las que las empresas pueden acudir de forma voluntaria, facilitarán la presentación de dicha comunicación previa, así como de la documentación que se debe acompañar, certificando si la instalación o actividad es conforme con la normativa sectorial y municipal. Estas entidades se configuran así como las únicas responsables frente a las administraciones públicas del contenido de las certificaciones, aportando seguridad al inversor al resultar responsables de cualquiera error en la documentación o en la ejecución.

Entre los trámites que gestionan y de los que responden las ECCOM, se encuentra la memoria explicativa de actividad, la justificación de los pagos de los tributos municipales, el proyecto y la documentación técnica exigible según la naturaleza de la actividad, o las autorizaciones e informes preceptivos. Estas entidades serán registradas por la Consellería de Economía, Emprego e Industria, previa acreditación en la Enac, debiendo suscribir pólizas a fe que cubran los riesgos de su responsabilidad.

Con este nuevo reglamento, que entrará en vigor en 20 días, la Xunta da un nuevo paso en la simplificación administrativa y la eliminación de barreras para facilitar la actividad empresarial.