En un encuentro celebrado recientemente en el seno del Clúster de la Función Logística de Galicia, las infraestructuras ferroportuarias fueron reconocidas entre las mayores urgencias del sistema logístico de Galicia para posicionar internacionalmente a esta comunidad en las cadenas globales del movimiento de mercancías. En concreto, por su importancia estratégica y el grado de avance de los proyectos, los ramales de conexión ferroviaria del Puerto Exterior de A Coruña y de Ferrol (actualmente en obras) fueron identificados como las obras más relevantes en el corto plazo.

En el caso concreto de las instalaciones en Punta Langosteira, entre las Administraciones públicas y las empresas privadas se llevan invertido más de 1.000 millones de euros y están planificados otros 150 millones privados en el corto plazo. Una buena prueba de la importante apuesta que la función logística de Galicia hace por esta rada.

Sin embargo, resulta absolutamente necesaria la conexión ferroviaria para garantizar la competitividad y la sostenibilidad en el movimiento de mercancías en Galicia, especialmente en aquellas como los graneles sólidos en las que el transporte supone una parte muy importante de su coste. Cabe recordar que el ferrocarril es el transporte terrestre de menores emisiones y el más barato para el movimiento de grandes volúmenes de mercancías y, en este sentido, su operativa en condiciones eficientes permitiría ampliar el radio de acción de este puerto.