Posición del colectivo empresarial ante la próxima cita electoral
Círculo lamenta que "la falta de diálogo y de interés político sume inestabilidad al país"
"España no puede ser rehén de personalismos políticos que impiden la formación de gobierno y la puesta en marcha de actuaciones de gran calado que vienen siendo reclamadas por la ciudadanía desde hace décadas". Así se inicia la reflexión del Círculo de Empresarios de Galicia ante la falta de candidato a presidir el Gobierno y la previsible cita electoral de noviembre.
Una vez más, Círculo reclama a las fuerzas constitucionalistas sentido de Estado, cortesía y respeto parlamentarios hacia el partido más votado. “España no puede estar sometida a una repetición sistemática de consultas electorales cada año porque los candidatos no se entienden”, ha señalado la presidenta de la organización empresarial, Patricia García, que anima a los candidatos a superar sus diferencias y a hacer cesiones por el interés general de los ciudadanos, “como hacen las empresas cada día en aras de garantizar su competitividad, y como hacemos las personas en general ante un proyecto colectivo”.
"La situación política que está viviendo España- cuatro convocatorias de elecciones generales desde 2015- no hace sino revelar un estruendoso fracaso de los partidos políticos y, por extensión, de sus grupos parlamentarios, que se contrapone con lo que acontece en otros países europeos y que está empezando a pasar factura a la economía española y a la estabilidad y funcionamiento normal de las instituciones", señala la declaración.
En efecto, los gobiernos de coalición en Europa son "resultado de madurez democrática, sensatez y sentido de Estado. El ejemplo paradigmático de un país con alto grado de desarrollo como Alemania, con gobiernos de coalición conformados por conservadores de la CDU y socialdemócratas del SPD, parece impensable en España", añade el texto.
En opinión del Círculo, España debe entrar ya en esa nueva fase, pues no parece probable que se vayan a dar mayorías suficientes para formar gobierno y serán exigibles diálogo, negociación y generosidad, dejando de lado partidismos y personalismos, por el bien del país.
“Está en juego el futuro económico y social de España. Tal y como advertíamos ya en junio, lo ocurrido en los últimos años no es sino el preludio de una época, basada en parlamentos multipartidistas, sin mayorías claras, y tenemos que aprender a vivir con ello”, subraya Patricia García. “Necesitamos políticos dialogantes, dispuestos a pactar, a ceder y a respetar la voluntad ciudadana, apoyando la formación de gobierno y rechazando trabas a su acción. Hay múltiples fórmulas para ello: desde gobiernos de coalición a acuerdos puntuales, pasando por pactos de Estado en materias estratégicas o pactos de legislatura que faciliten la gobernabilidad. Para ello y como mínimo, la abstención de los partidos constitucionalistas, es una solución razonable con el fin de evitar la parálisis del país”.
Es, además, el momento de llevar adelante los grandes pactos de Estado en materias como la educación, la sanidad, la justicia, las pensiones, el mercado laboral y la política exterior, entre otras, con el fin de garantizar la igualdad entre los españoles, así como la seguridad jurídica a personas, empresas e inversores nacionales y extranjeros.
Aunque somos conscientes de la dificultad que conlleva, cabe también reflexionar sobre una reforma de la Ley Electoral que facilite mayorías más estables o que al menos impida la presentación de candidatos más allá de dos legislaturas en el caso de que no sean capaces de propiciar la formación de gobierno, así como el establecimiento de percepciones económicas mínimas para los parlamentarios electos en tanto no se constituya un nuevo gobierno.
La desaceleración del crecimiento económico y la posible crisis que conlleve, así como la grave situación por la que pasa España como consecuencia del conflicto en Cataluña, son razones más que suficientes para que los intereses generales estén por encima de los intereses de partido opersonales.
"España necesita, ahora más que nunca, hombres de Estado con capacidades contrastadas y no meros jefes de partido", concluye el comunicado.